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Por Sabrina Pont
Ubicada en el corazón de Santa Cruz (a 70 km de Perito Moreno), Cerro Negro se ha erigido como uno de los yacimientos mineros más emblemáticos de Argentina. A lo largo de sus diez años de actividad, la mina ha producido 3,6 millones de onzas de oro, lo que la convirtió en un pilar de la economía local y en un referente de innovación en la industria.
Operado por la compañía norteamericana Newmont, la mayor productora de oro a nivel mundial con una extracción anual de 5,5 millones de onzas, Cerro Negro no sólo ha logrado superar sus objetivos iniciales de producción, sino que también ha adoptado un enfoque pionero en la implementación de nuevas tecnologías. Desde la firma se destacan dos de esos avances aplicados: las operaciones teleoperadas, que han mejorado significativamente la seguridad de los trabajadores y la digitalización de procesos, que permite una gestión más eficiente y precisa de las operaciones diarias.
“Estos logros tecnológicos posicionan a la mina como la primera subterránea en la Argentina en adoptar estas innovaciones y marcan un hito en la minería nacional”, señala Marcelo Campos, gerente general de Cerro Negro, en diálogo con Santa Cruz Produce.
Actualmente, Newmont Cerro Negro emplea a más de 1.500 personas e indirectamente a otras 4.800. Según el directivo, más del 70% de la fuerza laboral de la mina proviene de la provincia de Santa Cruz, lo que dimensiona el compromiso de Newmont con el desarrollo local. “Además, la empresa ha realizado contribuciones con más de USD 45 millones al Fideicomiso Provincial UNIRSE, que han servido para financiar obras de infraestructura vitales para la comunidad”, indica.
Si bien Cerro Negro ha superado desafíos significativos durante su primera década, un reciente trágico incidente marcó un punto de inflexión en toda la operación. “Lamentablemente, este año nos enfrentamos a la pérdida de dos colegas, un hecho que nos ha impactado profundamente y que nos ha llevado a una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad y a la implementación de medidas avanzadas de monitoreo y capacitación, que han reforzado la cultura de seguridad dentro de la organización”, sostiene Campos.
En términos de sostenibilidad, según el directivo, la mina ha adoptado un enfoque integral que abarca desde la gestión eficiente de recursos naturales hasta la minimización de su huella ambiental. La exploración continua dentro del distrito minero es otra área clave para Cerro Negro, con inversiones que superan los USD 330 millones en la última década, destinadas a prolongar la vida útil de la mina y a descubrir nuevos recursos.
A medida que Cerro Negro mira hacia el futuro, la empresa se contrapone a un entorno económico y regulatorio cambiante. De ahí la importancia de la reglamentación del Régimen de Inversiones y Gestión Industrial (RIGI). Campos enfatiza que la estrategia de la firma es, para el corto y mediano plazo, lograr una producción estable y un crecimiento sostenido, impulsados por inversiones estratégicas y un enfoque constante en la innovación.
“Estamos comprometidos a mejorar la eficiencia operativa, reducir nuestro impacto ambiental y aumentar la seguridad en todas nuestras operaciones. Este enfoque, combinado con una cadena de valor competitiva y la preparación adecuada de talentos, es esencial para mantener nuestra posición de liderazgo en la industria”, afirma el directivo y completa: “Si logramos estos objetivos, el futuro de Cerro Negro es prometedor, con un énfasis en la sostenibilidad y la creación de valor a largo plazo para nuestras partes interesadas y para la comunidad”.
SCP: A diez años del inicio de operaciones en Cerro Negro, ¿cuál es su balance general de lo logrado hasta ahora?, preguntamos a Campos.
Campos: El balance de estos diez años en Cerro Negro ha sido profundamente enriquecedor y transformador. Desde superar desafíos técnicos y naturales hasta consolidarnos como una mina líder en la Argentina y la región, hemos demostrado lo que significa construir un legado sostenible en la minería.
Además de nuestro éxito productivo, hemos implementado programas de sostenibilidad que benefician a las comunidades locales, destacando nuestra contribución al Fideicomiso Provincial UNIRSE, que financió importantes obras de infraestructura, como por ejemplo la línea de alta tensión que pretende unir las localidades de Perito Moreno y Los Antiguos con el Interconectado Nacional y el Núcleo Educativo de Perito Moreno.
SCP: ¿Qué tecnologías han probado para abordar los desafíos técnicos?
Campos: Uno de los hitos más significativos en cuanto a innovación ha sido la implementación de operaciones teleoperadas. Esto ha permitido mejorar la seguridad de nuestros trabajadores y también optimizar la productividad y prolongar la vida útil de nuestros equipos. Además, hemos avanzado en la digitalización de nuestros procesos, lo que nos ha permitido obtener datos en tiempo real para la toma de decisiones más informadas.
Estamos convencidos de que la operación telecomandada es un paso clave hacia la automatización y abre nuevas oportunidades para la inclusión y la reconversión laboral hacia la minería del futuro. Nuestro foco principal son las personas que conforman Newmont Cerro Negro y es por ello que nuestra prioridad es la capacitación permanente, invirtiendo en el desarrollo y preparación de nuestros colaboradores para enfrentar los desafíos tecnológicos del mañana.
SCP: ¿Qué medidas tomaron tras el trágico incidente que resultó en la muerte de dos operarios?
Campos: La pérdida de dos colegas fue un momento muy difícil para todos en Cerro Negro. Nos obligó a detener las operaciones y realizar una revisión exhaustiva de todos nuestros protocolos de seguridad. Decidimos implementar nuevas medidas y fortalecer las ya existentes; intensificamos nuestras capacitaciones en seguridad, con las que promovemos una cultura de cuidado mutuo y responsabilidad compartida en todos los niveles de la organización, e incorporamos tecnologías de monitoreo avanzado, incrementado la frecuencia y profundidad de nuestras auditorías internas de seguridad.
Asimismo, creamos equipos dedicados exclusivamente a la supervisión y mejora continua de nuestras prácticas. En definitiva, fomentamos una cultura organizacional donde la seguridad es prioridad absoluta en todas las decisiones operativas. Nuestro objetivo es claro: garantizar que cada trabajador regrese a casa sano y salvo.
SCP: ¿Han podido sostener el nivel de producción? ¿Cómo afectó a la producción el cese de actividades y cuáles son las proyecciones para el futuro?
Campos: Hemos mantenido niveles de producción sólidos y consistentes, incluso en años con desafíos significativos. Cerro Negro sigue siendo el yacimiento productor de oro más relevante de la provincia y de la Argentina, con un rango de producción anual para los próximos años entre las 300,000 y 400,000 onzas. Mantener estos niveles de producción a lo largo de los siguientes años es esencial para conservar nuestra posición de liderazgo en la industria.
Con el cese de actividades tuvimos una oportunidad crucial para revisar y fortalecer nuestros protocolos de seguridad en todos los niveles. Este periodo de reflexión y ajuste no sólo nos ha hecho más resilientes, sino que también ha reafirmado nuestro compromiso inquebrantable con la seguridad y el bienestar de nuestros trabajadores. Implementamos mejoras significativas en nuestros procesos y protocolos y aseguramos que todas nuestras operaciones cumplan con los más altos estándares de seguridad. Este enfoque proactivo no sólo nos ha permitido recuperar la producción con el reinicio de actividades, sino también establecer una base aún más sólida y segura para el futuro. La seguridad es, y seguirá siendo, nuestra prioridad número uno. Continuaremos invirtiendo en formación y en tecnologías de vanguardia para proteger a cada miembro de nuestro equipo.
SCP: ¿Qué proyectos de exploración están desarrollando actualmente y cómo impactarán en la vida útil de la mina?
Campos: Contamos con varios proyectos de exploración en curso, diseñados para expandir y prolongar la vida útil de Cerro Negro. La exploración constante es esencial para descubrir nuevos recursos y garantizar un futuro sólido, tanto para nuestra mina como para la comunidad que nos rodea. Estamos invirtiendo de manera proactiva en identificar nuevas áreas de mineralización y en optimizar las reservas actuales. A lo largo de los últimos diez años hemos destinado más de USD 330 millones a la exploración en Cerro Negro, lo que subraya nuestra dedicación a asegurar el futuro de la operación. Seguimos comprometidos con la transparencia y la comunicación abierta, asegurando que todos los interesados estén al tanto de nuestros proyectos y de los avances que estamos logrando.
SCP: ¿Qué papel juega el Régimen de Inversiones y Gestión Industrial (RIGI) en sus planes de expansión y desarrollo futuro?
Campos: El RIGI es una herramienta estratégica que estamos considerando seriamente para nuestras futuras inversiones. Nuestro objetivo es aprovechar todas las herramientas disponibles para garantizar que Cerro Negro siga siendo una operación exitosa y sostenible. Hoy existen detalles que no conocemos, ya que se está trabajando en la reglamentación, pero entendemos que si se resuelven de manera positiva algunos interrogantes que tenemos, la aplicación del RIGI puede ofrecer los incentivos necesarios para impulsar nuevas inversiones y proyectos, fortaleciendo nuestra posición como referente en la industria minera, tanto en el país como a nivel mundial.
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