A partir de las 00:00 del jueves próximo (22 de septiembre) concluirá el despacho a la pesca de langostino, mientras que desde las 19:00 del día 30 de igual mes quedarán prohibidas las capturas de la especie en aguas nacionales. De esta manera, el Consejo Federal Pesquero decretó el cierre de la zafra.
Se trata de la última definición que tomaron las provincias en ese ámbito federal, mientras que en sintonía comunicó el cierre de las subáreas 8, 12, 15 este y 16. La zafra, generó fuerte movimiento en Puerto Deseado en desembarcos y procesamiento de alimento desde mediados de año. Caleta Paula también se vio beneficiado con la llegada de embarcaciones ante los conflictos que se suscitaron en los puertos de la vecina provincia de Chubut.
“El aumento del porcentaje de bycatch de merluza en las capturas que marca el inicio del proceso reproductivo de la especie y la presencia de langostino juvenil, sumados a la disminución de los rendimientos, ha llevado a las autoridades pesqueras a establecer las fechas que ponen fin a una temporada”, se informó tras la resolución tomada por las autoridades que integran el Consejo.
El langostino generó fuerte movimiento en Puerto Deseado, también impactó en Caleta Paula.
Comercializaciones
El langostino es una de las especies que integran el complejo exportador que surge de la pesca argentina y que tradicionalmente tuvo buena reputación en los mercados internacionales. Sin embargo, las estadísticas oficiales elaboradas en agosto por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) observó que en el primer semestre del año las transacciones mermaron un 66% debido a las bajas cantidades enviadas a los mercados.
Sin embargo, “se dio un escenario favorable para el mercado del fresco, las ventas fueron muy buenas y si bien el precio estuvo por debajo de los valores de 2021 se sostuvo con márgenes de rentabilidad”, informó Revista Puerto. Estados Unidos, Perú, España y China fueron los mercados de mayor demanda del producto argentino.
Realidad diferente es la que enfrentan los congeladores. “Las cámaras están llenas, el 50% de lo capturado sigue sin venderse y preocupa la falta de demanda de los principales mercados que todavía tienen stock de langostino comprado el año pasado a un precio superior al actual. En 2022 el precio se cayó un 30% y esperan ahora que a partir del cierre de la pesquería se estabilice y permita una reactivación de las ventas”, señaló la publicación especializada en la materia.
Descartes
Uno de los aspectos centrales que se debatió en el modelo pesquero está relacionado con el descarte. El Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) indicó que para calcular las estadísticas se debe agregar esa variable.
“Los descartes se dan en la flota fresquera y cada vez en mayor medida, también, en la flota congeladora. Arrastrar por más tiempo del permitido, en horas que no son las indicadas y levantar la bolsa con un volumen de captura imposible de procesar o encajonar antes del próximo lance, son temas de gran importancia sobre los que se deberá trabajar con miras a la temporada 2023“, se indicó.
Las estadísticas oficiales de las capturas de langostino señalan que al 13 de septiembre se descargaron 157 mil toneladas; para la misma fecha en 2021 se habían descargado aproximadamente 172 mil toneladas. Este descenso implica una caída del 10% respecto de igual período del año pasado, pero habrá que esperar los cálculos del INIDEP para saber cuánto se ha capturado en realidad.
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