A menos de una semana del incendio en el que la vecina María Castro perdió todo, se llevó a cabo el Festival Solidario en el barrio 30 Viviendas de Río Gallegos.
Joaquín Ampuero, el joven vecino que impulsó la actividad, recordó en diálogo con La Opinión Austral: “Cerca de las 03:00 (del lunes) pasó todo, me avisaron como a las 03:30 y esa noche no pude dormir pensando qué hacer. Al otro día, empecé a mandar mensajes y empezaron las confirmaciones, así de a poco se fueron sumando y se armó este evento tan lindo”.
Este sábado durante casi cinco horas, sobre la calle Che Guevara se montó un escenario artístico, hubo cortes de pelo, venta de choripanes y hamburguesas, presentaciones de murga y zumba.
Ampuero, quien vive en la misma cuadra donde ocurrió el incendio, reconoció: “Teníamos miedo al pensar: ‘Capaz no va a venir ningún vecino’, pero sabemos que los vecinos son solidarios, nos apoyamos entre vecinos y la mayoría vino”.
Recordó que “el 100% del dinero que se junte se va a donar para que levanten la casa” y acotó: estamos “agradecidos con los puestos, los cantantes, todos los artistas que han pasado. Re contentos”.
María, quien tiene una discapacidad visual, también habló con La Opinión Austral y manifestó: “No puedo verlo, pero siento la energía de ellos, vienen colaborando hace tiempo, toda la gente de Gallegos es muy solidaria, debo agradecer a todos, por sobre todas las cosas a mis hijos, a mi hijo que se arriesgó para salvarme, a mis hijos que están haciendo todo, a mis vecinos, a las familias, y a todos los que están colaborando. Después de la tragedia, es un abrazo al alma lo que me están dando“.
La madre de cinco y abuela de dos contó cómo se desató el incendio: “Tengo una habitación atrás, siempre cuelgo la ropa arriba del calefactor para que se seque y me vine a ver una película, me quedé dormida y después aparecí en el hospital“.
“No me enteré de lo que pasó, habría sido shockeante. Me rescató un bombero, no me encontraban, yo estaba en el sillón y todo era humo negro. El bombero me puso una frazada con agua, largaba humo, me llevaron al hospital y recién hace un par de días vine a la casa, necesitaba verla, se destruyó todo, de mi pieza no quedó nada”, manifestó.
Personal del IDUV visitó la vivienda, “vieron qué hace falta y ellos darán una pauta técnica para ver qué materiales necesito”, mencionó y destacó que “la gente está colaborando muchísimo, yo me quedé con lo puesto”.
María vive en el barrio desde hace 17 años. “Cuando vinimos, todos éramos madres de varios hijos chiquitos y no había paredones, era como un solo patio abierto, la mayoría son amigos de mis hijos, son como mis hijos también”, comentó.
Agradeció: “A ustedes que pueden llegar a difundirlo y que para cada persona que le suceda algo pueda llegar a tener esa colaboración, es maravillosa la gente de Gallegos”.
“Todo esto me lo da Dios”, cerró emocionada.
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