Ángeles Especiales trabaja con personas con diferentes patologías, a través de los centros de estimulación temprana, educativo terapéutico y de día.

Thelma Smart fue una de las asistentes, quien, al igual que su hermano Gerardo, tenía una enfermedad degenerativa llamada ataxia espinocerebelosa tipo tres. Como consecuencia de ello, Gerardo falleció en marzo de este año y Thelma hizo lo propio el sábado pasado.

Desde la asociación manifestaron un profundo dolor por la pérdida de “Thelmita“, como le decían quienes tuvieron la oportunidad de conocerla.

Una de ellas es Cristina Oyarzún, monitora a cargo de Patologías Adquiridas, quien -tal como señaló a La Opinión Austral– tuvo “el honor de trabajar y sobre todo compartir el día a día con ‘Thelmita’ y ‘Gera’”.

Thelma en uno de los talleres de la asociación.

Ángeles Especiales es un grupo pequeño y muy unido, relató Cristina, “todos muy unidos”. La pandemia no fue para nada sencilla y quienes asisten debieron posponer la presencialidad, al ser grupo de riesgo. “Este año nos ha tocado pasar por momentos muy duros, primero con la partida de ‘Gera’ y ahora ‘Thelmita’”, describió con pesar.

¿Cómo era Thelma? “Para ella, nada era imposible. Todo lo que proponía en taller, ella lo hacía a su tiempo, pero siempre demostró un gran interés y ganas de seguir aprendiendo”, relató Cristina. Con ella trabajaron diferentes técnicas, desde decoupage, reciclado, telar y pintura.

¿Cómo es la labor en Ángeles Especiales? La asociación cumplió 17 años desde sus inicios y consta de 3 centros: uno de estimulación temprana, otro educativo terapéuticos, ambos ubicados sobre la calle Santa Fe, y un centro de día, al que asistía Thelma, camino al barrio San Benito.

Este último cuenta con aproximadamente 50 concurrentes. En estos momentos, cada profesor y asistente tiene a un grupo de chicos con todos los protocolos adecuados y no se superan entre los cuatro y cinco concurrentes por sala.

“Las actividades se adecúan de acuerdo a cada alumno y cuando hay un proyecto en donde hay algo que alguno no pueda hacer, trabajamos en equipo para lograrlo”, valoró Cristina.

Para ella, Thelma “siempre estuvo rodeada de mucho amor”. En las fotos pueden verse los trabajos que realizaban juntas: “Esto fue un gran desafío para ‘Thelmita’ y ver su carita de felicidad al terminarlo no tiene precio, esas manitos mágicas que todo lo podían”, recordó con cariño.

Para finalizar, Cristina reflexionó en que “para todos es muy triste cuando parte uno de nuestros ángeles, pero también sabemos que ya no sufren más y ya no hay limitaciones”.

Santa Cruz histórica

Gerardo y Thelma fueron los primeros argentinos en viajar a China para realizarse un tratamiento experimental con células madre en el gigante asiático. Por aquel entonces, en junio de 2009, Thelma padecía un grado mucho más avanzado de la enfermedad.

En aquella oportunidad, gracias a la ayuda de toda una ciudad complotada para hacer el bien con colectas y donaciones, consiguieron los $ 150.000 que necesitaban para llegar a Beijing.

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