“Hay cada vez más interés de los jóvenes en aprender un oficio”

Mecánica, electricidad, herrería, corte y confección, y crochet, son algunos de los talleres que durante el segundo cuatrimestre del año llevó a cabo el Centro de Promoción de Derechos, dependiente de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia del Municipio de Río Gallegos.

Este sábado en el gimnasio “Lucho” Fernández se realizó la muestra de trabajos y se brindaron servicios de barbería, peluquería y manicuría. En el transcurso de la tarde, los y las adolescentes que participaron de los talleres de artes y oficios recibieron sus certificados.

“Estamos muy contentos por la concurrencia que ha tenido este cuatrimestre”, manifestó María José Oyarzo, jefa del Departamento de Promoción de Derechos, a La Opinión Austral.

“Cada año van sumándose más chicos y hay cada vez más interés en aprender un oficio, también vamos buscando nuevos talleres para sumar, estamos planeando otro taller para el año que viene. Estamos contentos porque funciona y los chicos están súper contentos con lo que aprenden en los talleres“, destacó.

Sobre los aproximadamente 200 adolescentes que recibieron sus certificados, mencionó: “La mayoría ya sale con un oficio para poder seguir trabajando desde casa o bien habiendo adquirido una experiencia y una herramienta más para el futuro”.

Realizando un balance, sostuvo que fue un año “interesante, hemos realizado actividades que estaban fuera de Promoción”, entre las que mencionó la participación en el Desfile del Día de la Primavera y la Batalla de Barberos.

Para finalizar, adelantó que en verano habrá talleres intensivos de verano y se prevé que las inscripciones se realicen a mediados de diciembre e invitó a conocer el espacio, ubicado en Congreso 390.

La Opinión Austral habló Laureano Ulloa, un adolescente que participa en el taller de carpintería desde hace dos años y que fue inscripto por su mamá ya que veía que post pandemia pasaba mucho tiempo con la computadora y los videojuegos.

“Me sirve aprender carpintería, algún mueble que se haya roto, sabés como arreglarlo. Lo que me enseñó el taller es la perseverancia porque lleva tiempo y esfuerzo hacer un mueble, es práctica y error”, destacó, y acotó: “Me encanta carpintería, es mi pasatiempo favorito”.