La doctora Ana Cabrera atribuyó la mejora en los índices de positividad al aumento de testeos en los puestos fijos

Desde el pasado 1 de agosto el Ministerio de Salud y Ambiente en conjunto con la Cámara de Diputados, el Ejército, la Cruz Roja y el Municipio de Río Gallegos, comenzaron acciones para implementar distintos puestos fijos de detección e hisopado en la ciudad. Los mismos tienen como finalidad aumentar la capacidad diagnóstica.

Hasta la semana pasada funcionó el puesto fijo del Colegio Guatemala, y por estos días se encuentran habilitados dos puestos ubicados en el Centro Administrativo San Benito y en el Gimnasio Municipal Benjamín Verón.

El puesto fijo de detección del barrio San Benito se ubica en el edificio del Centro Administrativo.

Respecto a esta modalidad de trabajo en cuanto a la detección de casos de coronavirus, la referente de Epidemiología de la cartera sanitaria, Ana Cabrera, señaló que la decisión de instalar estos puestos tiene que ver con la necesidad de aumentar la capacidad de testeos y mejorar los índices de positividad en la provincia. De ese modo se busca avanzar en la detección de casos positivos, como así también definir cuántos contagiados y casos negativos se registran. “La verdad que la labor se está desarrollando con mucha normalidad y todo transcurre de manera ordenada”, recalcó.

Dra. Ana Cabrera.

Al ser consultada acerca de los dichos de la secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti,  en relación a la mejora en cuanto a los índices de positividad en Santa Cruz, Cabrera precisó: “Los índices de positividad mejoraron por dos cuestiones: una por el aumento de detección y test en la provincia que permite que la relación entre casos positivos y el total de muestras realizadas de un porcentaje. Y por otro lado, la mejora en cuanto a la carga en el sistema nacional. Al ser tantos casos y testeos positivos y negativos, la carga al sistema nacional de vigilancia hace que haya cierto delay. Eso se está regularizando”.

Finalmente, Cabrera indicó que a través de los puestos fijos de detección se logró que no se forme el cuello de botella, dado que antes los hisopados sólo se hacían solicitando turnos o llamando al 107.