Esta mañana, Herman Cobos, un vecino de Río Gallegos se despertó con el ladrido de los perros. Se levantó y corrió la cortina de la ventana para ver qué pasaba. Se encontró con una postal inesperada. “¡Tengo un caballo en el jardín!”, contó en el aire de LU12 AM680. “Por favor, que el propietario me llame. No lo quiero largar porque si lo agarran barrio adentro y no lo encuentra más”.

 

 

Según el relato de Herman, el mismo equino que hoy pasta en su propiedad, ayer trotaba sin rumbo por la avenida Asturias “Una vez, se metió uno en lo de Saldías (una chacra cercana). Le pisó las canchas, todo. A los pocos días, apareció el dueño. Vimos quién se lo llevó porque se lo carnearon”.

 

 

“Está bien que la alfalfa está cara, pero tampoco para jugarse un caballo”, expresó entre carcajadas el vecino que ahora, de manera transitoria, tiene a “Cartucho” de mascota. “Es un marrón, un alazán”.

 

Sobre el final de la charla con LU12 AM680, el hombre recordó que los tiempos cambiaron. “Ahora, todos tienen caballos. Hay muchas tropillas y varios equinos sueltos. ¿A quién llamás? ¿A quién le reclamas? Es manso. Me lo traje con una zanahoria, así que imaginate”.

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