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Este sábado, el juez Ricardo Calcagno ordenó la liberación de seis personas detenidas por los incendios en El Bolsón, argumentando la falta de pruebas contundentes presentadas por la fiscalía.
La acusación, impulsada por el fiscal Francisco Arrien y el fiscal jefe Martín Lozada, sostenía que el grupo de jóvenes habría sido responsable de originar un foco en una propiedad de 2.000 metros cuadrados en la zona de Río Azul. Sin embargo, el juez cuestionó la solidez de la investigación, subrayando que los cargos se basaban en el testimonio de cuatro personas, tres de ellas pertenecientes a la misma familia.
“Es prematuro formular cargos con tan pocos elementos. No hay pruebas concretas”, sostuvo el magistrado, ordenando la inmediata liberación de los imputados. Además, destacó la falta de testigos que validaran las acusaciones y criticó la ausencia de una investigación más exhaustiva antes de efectuar las detenciones.
La detención de Nicolás Heredia: la única prisión preventiva
A pesar de la liberación de los seis acusados, Nicolás Heredia, de 31 años y oriundo de Senillosa, Neuquén, sigue detenido.
Heredia, un trabajador changarín que se encontraba de vacaciones en la Comarca Andina, alojándose en el camping El Rústico, colaboró activamente como voluntario. Fue detenido el martes 5 de febrero mientras esperaba transporte para seguir ayudando en la lucha contra las llamas. Declaró que en su mochila solo llevaba comida para los brigadistas en “los Pozones”.
El abogado defensor Nelson Vigueras enfatizó que los testimonios de la fiscalía presentan contradicciones evidentes y señaló que incluso el gobernador Weretilneck replicó información falsa al acusar a Heredia de “vestirse como brigadista para pasar desapercibido”.
Según pudo saber La Opinión Austral de la audiencia judicial, Heredia declaró haber estado ayudando en la zona de los incendios, llevando agua, frutas y sándwiches. Sin embargo, la fiscalía argumentó que testigos lo vieron en “actitud sospechosa”, aunque sus declaraciones presentan contradicciones con respecto a si llevaba una botella con supuesto combustible o si la encontraron después tirada a al vera de la ruta y la cargaron en la camioneta.
“No lo acusamos de nada, solo nos pareció sospechoso”, dijeron los testigos Agustín Peralta y Milagros Medina, sin embargo la fiscalía lo acusó de poseer la botella y descartarla.
Heredia denunció haber sido detenido arbitrariamente por personas ligadas a la intendencia de El Bolsón. “Me detuvieron y me tiraron una botella con nafta que supuestamente yo llevaba, que nunca toqué, ni nada. En mi mochila solo tenía comida, nada más que comida”, aseguró ante el juez Ricardo Calcagno.
El abogado defensor expuso que los testigos afirmaron haber visto a Heredia con una “camisa amarilla” del SPLIF (Servicio Provincial de Lucha contra Incendios Forestales), pero durante su detención llevaba pantalón de jean y camisa celeste. Además, según su defensa, la botella con combustible que lo incrimina fue encontrada tirada y no en su poder.
En tanto el juez Calcagno decidió, a pesar de tener en cuenta las contradicciones de la fiscalía con los testigos y las contradicciones entre los propios testigos, y la falta de pericia sobre si es o no combustible el contenido de la botella encontrada a la vera de la ruta, continuar con la investigación, manteniendo la prisión preventiva a Heredia.
Preocupación por la crisis de incendios en la Patagonia
Mientras las investigaciones y detenciones continúan generando polémica, la situación en El Bolsón se agrava. Más de 700 viviendas están en riesgo debido a la propagación de las llamas, que ya han consumido más de 3.000 hectáreas. Vecinos y brigadistas trabajan sin descanso para contener el fuego, mientras denuncian la ausencia de ayuda por parte del gobierno nacional.
El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) calificó las detenciones como “arbitrarias” y advirtió que la mala gestión de la crisis está dejando a la población en una situación crítica. En este contexto, la comunidad de El Bolsón sigue exigiendo respuestas y acción concreta ante la emergencia.
Contradicciones en la causa de Nicolás Heredia
El juez Calcagno determinó todo lo que le pidió la Fiscalía, a cargo de Francisco Arrién y Martín Lozada, quienes sostuvieron un relato con muchas inconsistencias. En primera instancia, reconocieron que Nicolás Heredia fue “interceptado” por dos personas que ahora son testigos de la causa, quienes declararon que lo hicieron por “tener cara sospechosa” mientras aguardaba solo a la vera de un camino, lejos del lugar de los incendios.
Los fiscales también argumentaron que Heredia no tenía herramientas de trabajo y llevaba puesta una remera amarilla del SPLIF, lo que su defensa desmintió con pruebas en la causa. Además, se sostuvo que Heredia habría descartado una botella con líquido combustible, pero testigos afirman que la botella fue hallada tirada en el camino, sin vínculo directo con el acusado.
Por ahora, la justicia mantendrá la prisión preventiva de Heredia durante un mes, bajo el cargo de “incendio en grado de tentativa”. Su defensa apelará la decisión, mientras que organizaciones de derechos humanos denuncian irregularidades en la causa y piden su liberación inmediata.
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