Ni toninas, ni delfines: falsas orcas. Miguel Iñiguez, presidente e investigador de Fundación Cethus, se refirió al curioso hecho ocurrido este domingo cuando decenas de cetáceos quedaron varados en la bahía de Ushuaia.

En la tarde del domingo, un numeroso grupo de cetáceos tuvo un extraño comportamiento en las costas de Ushuaia, los animales parecían desorientados y quedaron varados en la bahía.

El investigador Miguel Iñiguez se refirió al extraño fenómeno y se explayó sobre las posible causas que generaron el errático comportamiento de los animales.

En primer lugar, comenzó diciendo que no se trata de toninas ni delfines australes, como los que frecuentemente son avistadas a lo largo de la provincia de Tierra del Fuego y Santa Cruz, sino de “falsas orcas“. Esta es una especie oceánica que viven a mucha profundidad. “Si puede haber algún registro en la zona del Estrecho de Magallanes, pero en general son especies de aguas muy profundas”, señaló del investigador.

Por lo cual una de las principales hipótesis que manejan los especialistas es que “por tratarse de animales que vive en la profundidad, al llegar a aguas menos profundas se desorientan y pueden llegar a varar”.

Asimismo, surgió el dato que había un grupo de orcas, predadores naturales de falsas orcas y delfines, cerca del Canal de Beagle. En este sentido, indicó que esto podría haber asustado a los animales y provocar ese comportamiento.

Por otra parte, Iñiguez señaló que la mayoría e los animales que encallaron en Ushuaia fueron devueltos al mar y que varios investigadores se encuentran realizando una investigación sobre los animales que han muerto.

También están evaluando más variables que podrían haber influido en el extraño suceso. Al respectó explicó que “hay otras causas que pueden ocasionar varamientos en cetáceos, por ejemplo las prospecciones sísmicas para la búsqueda de petróleo y gas. El mundo de los cetáceos es acústico, entonces cualquier interferencia que haya en su sistema auditivo puede ocasionarle una desorientación o daño y esto lo lleva a varar”.

Además, contó que las falsas orcas viven en manadas y normalmente son lideradas. Si el espécimen al mando está enfermo o es muy viejo puede desorientarse. “Los animales fieles a su líder, ante llamadas que este emite, empiezan a seguirlo” y terminan varadas también.

Por ultimo se refirió a  los problemas que las redes de pesca ocasionan en el ecosistema marino. En este sentido, el presidente de Fundación Cethus alertó que en los últimos años se ha notado un aumento en la cantidad de animales que se encuentran varados o muertos.

“A principios de enero, hicimos una recorrida por el margen norte del Río Coig y encontramos 17 toninas muertas que quedaron atrapadas en redes de pesca”, aseguró.

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