El inusual cuadro de precipitaciones caídas el miércoles y calificadas como de “históricas” para Río Gallegos provocó, además de alarma y zozobra, episodios solidarios que de alguna forma pintan de cuerpo entero la respuesta solícita de buena parte de la sociedad. En el gimnasio debieron suspender la recepción de la colecta.

Ramona debió abandonar su hogar junto a sus hijos.

Ni bien se conoció que familias enteras eran evacuadas hacia el gimnasio 17 de Octubre, comenzaron a manifestarse las primeras donaciones, que iban desde alimentos no perecederos, vestimenta, calzado y hasta frazadas y colchones.
Muchas familias de la periferia que sufrieron los efectos del anegamiento de calles recibieron con alivio este tipo de gestos, ya sea desde las recepciones en el gimnasio 17 de Octubre o desde el asentamiento “Madres a la lucha”.
Sergio Valdez, jefe del gimnasio 17 de Octubre, reconoció ante La Opinión Austral la enorme cantidad de donaciones recibidas desde la noche misma del miércoles.
“La gente fue muy solidaria, más de lo imaginado, más aún, tuvimos que cortar la recepción de donaciones porque estamos colapsados. Lo que vamos a hacer es clasificar y entregar a la gente de acuerdo a la necesidad de cada uno”.
Cerca de las 19:00 horas aún había diez personas alojadas en el gimnasio, que pernoctarían nuevamente porque les era imposible retornar a sus hogares, ya sea por el frío o por anegamientos de las calles.
“Algunos volvieron a sus hogares, fueron a limpiar y ver cómo quedó la vivienda, y otros que retornaron para pasar la noche” dijo.
“Hemos recibido de todo, elementos de limpieza, frazadas, colchones. Nos superó la cantidad de donaciones. De todas maneras tenemos gente que no abandonó sus hogares, pero que necesita algunas donaciones” añadió.

Testimonio
Ramona, una mujer que junto a sus hijos debió buscar refugio en el gimnasio, agradeció las donaciones recibidas, aunque aún debía pasar la noche en uno de los dormitorios del edifico. De residencia en el Bicentenario II, admitió que las carencias son totales, desde luz y otros servicios, “aunque nos prometieron que van a colocar el gas. El miércoles cerca de las 14:00 horas vimos que el agua ya se acercaba a la casa. Aguantamos hasta las seis de la tarde, pero ya no podíamos más al rebalsarse el pozo del baño, el agua ingresó a la casa y no podía ya estar con los nenes así”.

Madres a la lucha
Norma Díaz decía a LU12 Radio Río Gallegos que si bien la situación era complicada por la inundación, “estamos en la etapa de sacar el agua. Desde la Municipalidad nos enviaron un camión atmosférico, así que quizás nos simplifique la tarea”.
En el SUM, salón de usos múltiples, iban acopiando la colecta de la gente aunque continuaban necesitando botas, alimentos no perecederos, leche, pañales, abrigo, etc.
“Anoche (por el miércoles) organizamos una olla popular para vecinos que continuaban sacando agua de sus casas. Mucha gente perdió cosas, esperemos que no vuelva a pasar” se esperanzó.

En la Universidad
Hubo otros episodios también, que las redes solidarias se encargaron de difundir, como por ejemplo el publicado en su facebook por una estudiante de la UNPA, Alexandra Solange.
En aquella caótica jornada de miércoles y cuando buena parte de la ciudad comenzaba a ser pasada por agua, en la Unidad Académica de Río Gallegos el panorama también se teñía de nerviosismo; a la preocupación de un imprevisto corte de luz (que afortunadamente no sucedió) se sumaba además que las lluvias continuaban y se conocían cortes de calles en buena parte de la ciudad, y que el servicio de colectivos se suspendía.
“Hace unos días me llamó la atención en el hall de la universidad la foto de un chico que está participando de política universitaria actualmente, en forma burlesca con un cuerpo de gato… este incidente dejó mucho que desear y me quedé preguntándome qué clase de persona hace esas chiquilinadas y falta de respeto hacia otro compañero. Hoy, entremedio de la crisis de la evacuación mientras bienestar (se refiere a la oficina de Bienestar estudiantil, NdR) y todo el equipo UNPA ponía a disposición la movilidad para que todos llegáramos a nuestras casas éste chico fue el que estaba calmándonos y organizando para que pudiéramos acceder al transporte. Felicito públicamente este gran gesto que tuviste y ojala nadie ni nada te quite las ganas de ayudar a otros estudiantes ni de seguir participando en política universitaria. Hoy cuando estaba todo hecho un caos ahí estabas dando una mano. No sé quién sos ni qué carrera estudias, tampoco te conozco personalmente pero admiro mucho a las personas que son solidarias y se preocupan por el de al lado.(?) Está muy peligroso afuera. Acaban de cerrar la UNPA y mandarnos a casa por seguridad y hay chicos varados ahí, se suspende el transporte público. Gracias a Dios que siempre me cuida y puso una amiga en el camino que me trajo!!”.

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