Blanca fue una guerrera que luchó por vencer la leucemia hasta el último minuto. Tenía 38 años dos hijos de 16 y 10 años.

Su muerte causó conmoción en la comunidad y trascendió portales de noticias por la firmeza con la que peleó el cáncer. Dejó un legado de amor, fortaleza y esperanza, que toca el corazón de todos los que la conocieron y siguieron su historia.

La historia de Blanca Pardo es una de esas que inspiran conmueven hasta lo más profundo del alma. Desde hace años, su batalla contra la leucemia se convirtió en un ejemplo de coraje y determinación, enfrentando no sólo la enfermedad, sino también los desafíos que la vida le presentaba.

La joven riogalleguense atravesó dos trasplantes de médula ósea, uno en el año 2015 y otro en enero de este año, ambos procesos marcaron etapas de esperanza y valentía, demostrando también la importancia de la donación y la solidaridad humana.

La comunidad acompañó la marcha hasta la cochería, entre globos blancos y silencio. FOTOS: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

Blanca tenía 26 años y ya era madre cuando recibió el diagnóstico de cáncer. Su primer trasplante fue gracias al Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH) que en sus 20 años de funcionamiento ininterrumpido posibilitó que más de 1.500 personas que no contaban con un donante compatible en Argentina, recibieran el trasplante de médula ósea que necesitaban para seguir viviendo.

Actualmente, el Registro Nacional de Donantes de CPH tiene más de 330 mil inscriptos y forma parte de la Red Mundial World Marrow Donor Association (WMDA) que agrupa registros de más de 63 países y cuenta con más de 41 millones de donantes registrados de todo el mundo.

Cabe señalar que en el “trasplante de médula” lo que se trasplanta no es un órgano sino “células progenitoras hematopoyéticas” (CPH), es decir, aquellas que se encuentran en la médula ósea de un donante vivo compatible y que tienen la capacidad de dividirse para generar los glóbulos rojos, blancos y plaquetas que componen la sangre.

En este marco, Blanca recibió la donación de medula ósea de un ciudadano polaco, a quien pudo contactar una vez cumplidos los plazos reglamentarios.

Su familia se unió en abrazos en el aeropuerto. FOTOS: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

En enero de este año, Blanca, se sometió a un nuevo trasplante. La Opinión Austral registró el apoyo inquebrantable de la comunidad, que unió sus corazones en cadenas de oración por la salud de Blanca en aquel momento en que todo comenzó a complicarse. La joven, derivada el año pasado al Hospital Italiano de Buenos Aires, había tenido una complicación de salud que llegó por un virus hospitalario.

En aquel momento, su familia pidió una cadena de oración para pedir por su recuperación, mientras que con una rifa lograron viajar varios de sus familiares a acompañarla y, finalmente, despedirse en un último beso.

En cada lucha, la joven peleó cada uno de los obstáculos y contó con el acompañamiento de toda la comunidad, de su familia, sus amigos, allegados, compañeros de trabajo, pero también desconocidos que empatizaron con su historia.

El adiós

Este martes al mediodía, en una jornada fría, la familia, allegados, amigos y compañeros de trabajo se acercaron al aeropuerto de Río Gallegos, convocados para recibir los restos de Blanca, que arribó desde Buenos Aires.

En el lugar, enormes banderas que rezaban “Hasta siempre guerrera” y “No se muere quien se va, se muere quien se olvida, siempre en nuestro corazón Blanca“, cubrían de amor contrastando el clima de dolor por la pérdida de Blanca. Entre abrazoslágrimas pesar, fueron llegando algunos de sus familiares que estaban con ella en la Capital Federal.

Tenía 38 años y dos hijos de 16 y 10 años.

Seguidamente, una extensa caravana de autos con globos blancos se trasladó hasta Cochería del Sur, donde, al momento, descansa Blanca. El sepelio, según indicó la familia, sería este jueves en horario a confirmar, ya que están esperando a familiares que aún están en Buenos Aires, entre ellos, su pareja, Juan Manuel López, quien días atrás se despidió de “Blanquita”, como le decían, con un emotivo mensaje.

“Peleamos tanto mi amor, la peleaste tanto. Que orgulloso estoy de poder haber podido acompañar a semejante guerrera. Perdón por no poder sacarte de ese infierno como te prometí, pero sé que ahora estás en paz. Descansando por fin, como te mereces. Te voy a buscar en esta y todas las vidas porque se que dos almas que se encuentran como nosotros no es casualidad. Por eso esto no es un adiós, sino un hasta luego“, había escrito en un texto desgarrador.

Su pareja, Juan Manuel López, días atrás se despidió con un emotivo mensaje.

La propia Blanca había relatado su lucha en varias oportunidades: “¿De dónde saco la fortaleza? No lo sé, quizás sean mis hijos, mis ganas de vivir o mi compañero que no me deja caer. Te voy a ganar maldita leucemia. Te juro que te gano“, había escrito en sus redes en el 2022.

Quienes hoy la despiden y la recuerdan, saben que su sonrisa, su amor por la vida y su valentía inquebrantable es y será un ejemplo de lucha para quienes, muchas veces, no saben cómo seguir.

“Sos una obra de arte que Dios decidió comprar”

Con la partida de Blanca sus familiares dejaron un recuerdo de ese lazo que los unió a la joven luchadora. Entre ellos, su hermano Juanchi, que en un texto describió su sentir: “Llegó ese día que nunca en la vida me imaginé, para mí sigue siendo mentira esto”, expresó.

En una tierna imagen de ellos dos, con ella aún internada en el hospital, su hermano señaló: “No te hubiese gustado que te vean así con esta foto, fue una de la primera vez que vine a verte, pero que vean que seguís siendo hermosa, pero esta portada va a quedar para el resto de mi vida no la saco nunca más, como tu recuerdos de mi corazón, nunca más”.

Agregó sobre Blanca: “Sos mi ángel hermoso, el que me va guiar voy a confiar más en vos que en Dios, gracias por enseñarme todo lo que no sabia, sos una obra de arte que Dios decidió comprar y siempre gana el más fuerte”.

En su despedida, le expresó a su hermana: “Perdón mi amor por dejarte, pero era egoísta que te tengamos en una cama postrada con tanto dolor, te amo por siempre, mi cuerpo quedó caminando, pero mi alma se fue con vos. Mil veces te amo por siglo de los siglos y ya nos vamos a encontrar, buen viaje mi reina, que en paz descanses ‘quiquina’ de mi corazón, 5 de agosto 2023, déjame que me quede en este día suspendido en el aire de tu aroma”, cerró.

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