El Barcelona presentó este miércoles a su nuevo jugador, el delantero argentino Lucas Román, y le fijó una cláusula de rescisión de 400 millones de euros, la cual quedará en la historia del fútbol argentino.
Román era “la joya” de Ferrocarril Oeste y fue transferido a Barcelona hace una semana para formar inicialmente parte del equipo B del club catalán que dirige el mexicano Rafael Márquez, excompañero de Lionel Messi.
La cuenta oficial de Twitter de la filial barcelonista que compite en la tercera división del fútbol español hizo la presentación con declaraciones del chico que el próximo 10 de febrero cumplirá 19 años y jugó por Ferro en la Primera Nacional.
En el video, “Pocho” dijo sus primeras palabras como jugador Culé. “Es una alegría inmensa, estoy muy emocionado. Voy a dar lo mejor asique estoy muy contento”.
Luego, le preguntaron al ex Ferro cual era su posición para que los hinchas del Blaugrana vayan conociéndolo. “Puedo ser extremo, enganche, me muevo por todo el frente del ataque. Soy zurdo, intento jugar el mano a mano, siempre dando lo mejor para el equipo”, destacó.
Luego, agregó: “Ahora que estoy aquí puedo decir que los sueños están para cumplirse, así que por eso nunca dejen de soñar”.
En principio el contrato iba a ser hasta 2027, pero el club “blaugrana” lo verificó hasta diciembre de 2026, luego de adquirir el 85 por ciento del pase en 1.200.000 euros más otros 3.800.000 en concepto de bonus. Y la monstruosa cláusula de rescisión, por supuesto.
La despedida de Lucas Román de Ferro
En un video publicado en la cuenta de Twitter de Ferrocarril Oeste, “Pocho” agradeció al club por todo el cariño recibido a través de los años. “Los voy a extrañar mucho y ojalá algún día pueda volver”, expresó.
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