Ana Rosenfeld es una de las abogadas mediáticas más famosas del país y se la conoce como la “el terror de los maridos”. Sin embargo, ahora fue denunciada por tres de sus clientas que aseguran haber sido estafadas.
La noticia se volvió viral luego de que el viernes, Yanina Latorre compartiera en su cuenta de Twitter todo lo que le llegaba sobre el caso.
Así salió la luz un serie de denuncias de mujeres que acusan a Rosenfeld de estafa y mala praxis.
Gabriela Centurión, Carolina Maneiro y Fernanda Charquero contrataron a la abogaba para que se encargara de sus juicios de divorcio, pero terminaron demandadas. No son las únicas, junto a otras mujeres en la misma situación, presentaron una denuncia en el Colegio Público de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires pidiendo sanciones ejemplares. Según trascendió, Rosenfeld inició 16 causas a ex clientas.
En comunicación con Pablo Layus, las demandantes contaron el difícil momento que atraviesan.
La primera en hablar fue Gabriela Centurión, quien contó que “todo arrancó en el año 2010. Fui a verla a su estudio y al principio se mostró comprometida. Yo estaba en una situación compleja, de extrema vulnerabilidad. Le entregué cinco mil dólares, nunca me dio un recibo, y firmé un convenio de honorarios leonino que tenía una trampa en una de sus cláusulas: “si yo decidía prescindir de sus servicios, tenía que pagarle diez mil dólares de indemnización”, aseguró.
Lo que siguió después de la firma fue el inicio de una verdadera pesadilla que ya lleva once años y que todavía se encuentra en Tribunales, lo mismo que les pasó a 16 mujeres que también decidieron contratar los servicios de la doctora Rosenfeld.
“Luego de entregarle la plata y firmarle el convenio, literalmente me abandonó. Nunca más volvió a responder mis llamados, siempre estaba de viaje, y me era imposible ubicarla. Pasó un año y ni siquiera había iniciado el trámite de divorcio”, expresó Gabriela.
Al ver que su situación judicial no avanzaba, en el año 2012, Gabriela tomó la decisión y se desvinculó de su abogada. Pero, a los pocos días Rosenfeld le inició una demanda por diez mil dólares, ejecutando una de las cláusulas del convenio que le había hecho firmar cuando tomó su caso.
Carolina Maneiro: “Yo recibí violencia de género de parte de mi marido y también de mi abogada”
Carolina Maneiro, la segunda denunciante, decidió separarse de su marido, tras quince años donde sufrió violencia de género y amenazas de muerte por parte de quien fuera su pareja y padre de sus dos hijos.
“Estaba con depresión, se me cerró el estómago por la angustia, y después de varios meses tenía un principio de raquitismo. Como vivía en el mismo edificio que la madre de una modelo y conductora famosa -a quien Ana le llevó adelante su divorcio-, le conté que me estaba separando, me recomendó a la doctora Rosenfeld. La contraté en el 2012 y fue lo peor que me pasó en la vida…”, recordó Carolina.
Sacó un préstamo de 20 mil dólares que le abonó a Rosenfeld para que tomara el caso, y al igual que la anterior demandante, nunca recibió un recibo por dicho dinero.
Además asegura que le hizo firmar un convenio en el que se especifica que la doctora se “queda con el 20 por ciento de todo lo que consiga por la separación de bienes” y que, en caso que le revoque el patrocinio, “debería pagarle cien mil dólares de indemnización”.
“Su trabajo fue malísimo… Cada vez que había un acercamiento de la otra parte para intentar llegar a un acuerdo, ella estaba de viaje… Como si esto fuera poco, dejó que se caigan las medidas cautelares y nunca inició el juicio de división de bienes. Pasaron tres años sin ningún resultado, le perdí la confianza, le revoqué el patrocinio y Ana me demandó”.
Cuando la llamaron de tribunales, Carolina se encontró con otro problema. Un papel escrito con birome, de puño y letra de Rosenfeld, en el que constaba que “como había entrado en vigencia el nuevo código civil, ahora la indemnización pasaba de cien mil a un millón de dólares”, algo que según Carolina, nunca se acordó.
Fernanda Charquero: “Me pedía 50 mil dólares como indemnización”
La tercera denunciante es Fernanda Charquero, que piensa iniciarle una demanda por mala praxis a la doctora, y le contó a Layus su caso vía telefónica:
“Me separé en el año 2011, y contraté a la doctora Rosenfeld a quien le pagué 8.000 dólares. Al igual que al resto de las chicas me hizo firmar el convenio con la cláusula quinta y cuando quise acordar con mi marido en 2016, la doctora me pedía 50 mil dólares como indemnización… Yo tenía un hijo menor y no podía ni darle de comer…, por eso me tuve que quedar con ella. El trabajo que hizo fue espantoso. Incluso un juez la sancionó por mala conducta en una audiencia. Como si fuera poco, dejó vencer los plazos de un planteo que hicieron los abogados de mi ex marido, y por culpa de eso perdí un montón de bienes de mi propiedad y tuve que pagar 200 mil dólares entre costas y honorarios. La cuota alimentaria recién me salió en 2017 porque yo fui a preguntar al juzgado que sucedía”, concluyó.
El caso ahora está en manos de los abogados Francisco Oneto y Darío Czernizer, ambos titulares del Estudio Jurídico Czernizer, Oneto, Rallin & Asociados, quienes tomaron como clientas a Gabriela, Carolina, y Fernanda y decidieron, entre otras cosas, presentar sus denuncias en el Colegio Público de Abogados contra la doctora Ana Mirtha Rosenfeld.
Allí se pide “que se le apliquen las máximas sanciones que prevé el Código de Ética del Colegio de Abogados”.
Para el doctor Dario Czernizer, “no solo habría mala praxis de parte de Rosenfeld en el caso de Fernanda Charquero. Las pruebas y los testimonios que tenemos de varias denunciantes muestran un modus operandi que se repite y que constituiría una estafa para con sus clientas. Todo ello sin mencionar las evidentes faltas éticas de la profesional”.
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