La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) ha tomado medidas drásticas al prohibir la comercialización y consumo en todo el territorio nacional de una línea de suplementos dietarios. Esta acción se basa en la Disposición 6506/2023, publicada en el Boletín Oficial. La ANMAT ha declarado la prohibición de la “elaboración, fraccionamiento y comercialización, en todo el país y en plataformas de venta en línea”, de varios productos pertenecientes a la marca King Hardcore, así como otros de diferentes marcas como Innovative y KN Nutrition. Esta decisión se debe a la falta de identificación fehaciente sobre su producción y a la ausencia de registros sanitarios de establecimiento y producto, convirtiéndolos en productos ilegales.
Entre los productos prohibidos se encuentran ‘MK-677 Dietary Supplement’, ‘ANAVAR Dietary Supplement’, ‘LIGANDROL Dietary Supplement’, ‘M-DROL Dietary Supplement’, ‘SUPER DROL Dietary Supplement’, ‘CARDARINE Dietary Supplement’, ‘S-23 Dietary Supplement’, ‘TRENAVAR Dietary Supplement’, ‘FEMATROPE Dietary Supplement’, ‘Hell Fire EPH 150 EPHEDRA EXTRACT’ y ‘IBUTAMOREN MK 677 Dietary Supplement’.
La ANMAT señala que la prohibición se basa en la imposibilidad de identificar de manera clara y segura el origen y la producción de estos productos. Asimismo, al carecer de registros sanitarios tanto para el establecimiento como para el producto en sí, se confirman como productos ilegales. Además, el organismo advierte sobre los riesgos que estos suplementos pueden presentar para la salud de los consumidores, ya que al desconocerse sus condiciones de producción y elaboración, podrían ser potencialmente perjudiciales.
Esta medida de la ANMAT refuerza la importancia de verificar siempre la procedencia y legalidad de los productos que se consumen, especialmente en el ámbito de los suplementos dietarios. La salud y seguridad de los consumidores deben ser prioridad, y esta prohibición sirve como recordatorio de la necesidad de estar alerta ante productos que carecen de la debida certificación y aprobación sanitaria.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia