La comitiva argentina ya arrancó las reuniones técnicas en Washington para concretar la última milla de las negociaciones que hasta ahora se produjeron de manera virtual entre el Palacio de Hacienda y las oficinas de los funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI). Desde Buenos Aires, el ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, sigue el “paso a paso” de sus enviados, según indicaron fuentes de su entorno a cronica.com.ar, mientras acerca posiciones con los países accionistas del organismo multilateral de crédito más reticentes a un acuerdo.

Un portavoz del FMI confirmó a este medio que arrancaron las reuniones para las que viajaron ayer por la noche el viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein; el jefe de asesores, Leonardo Madcur; el vicepresidente del Banco Central, Jorge Carrera; el vicepresidente segundo de la autoridad monetaria, Lisandro Cleri; y, está en vuelo, el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.

En abril, la segunda al mando en el FMI aceptó el planteo de Sergio Massa: recalibrar el acuerdo ante el impacto de la sequía.

Los funcionarios argentinos encargados de dialogar cara a cara con los representantes del Fondo esperan ultimar los detalles para llegar el viernes a un Staff Level Agreement. Massa no quería que viajen hasta que ciertas condiciones sobre las metas de reservas, déficit fiscal y desembolsos de acá a fin de año tuvieran cierto nivel de consenso. “Allá de rehénes no nos van a tener”, le decía a su entorno el ministro en la previa.

Esta tarde, desde el Fondo informaron: “El equipo del FMI y una delegación argentina comenzaron las reuniones técnicas presenciales esta tarde en Washington D.C., para avanzar en la quinta revisión del programa respaldado por el Fondo. Se espera que estas reuniones continúen durante los próximos días”, agregaron.

La letra chica de las negociaciones con el Fondo

En base a los trascendidos por los pasillos del Palacio de Hacienda el principal escollo es que la meta de déficit fiscal se amolde a las necesidades de la Argentina. La exigencia del FMI de bajarla al 1.5% del PBI es lo que habría demorado tanto el viaje de la delegación. A Massa le parece razonable el 1,9%. El hecho de haber sumado a Rigo al equipo (esta tarde estaba en vuelo a Washington) indicaría que la cuestión fiscal sería una de las claves para destrabar la quinta revisión. “No nos vamos a rendir en el altar del ajuste”, dijo la semana pasada Massa.

Massa junto a Kristalina Georgieva.

Las idas y venidas se debieron también al ordenamiento de los desembolsos, a los tiempos de las revisiones (el gobierno argentino busca que sea una única más cerca de fin de año) y a la necesidad de un margen de libre disponibilidad para fortalecer las reservas del Banco Central, especialmente con las elecciones primarias a menos de un mes y las generales en octubre. En este caso, se instaló una versión de que el Fondo estaría dispuesto a desembolsar unos 8,5 mil millones de dólares.

Hay tres vencimientos de pagos el último día de julio (luego de postergarlos dos semanas atrás) por un poco más de 2.600 millones de dólares que preocupan al equipo argentino.

Massa viajaría el jueves a Washington

Si todo va bien en estos días, Massa tiene planificado viajar el jueves por la noche a la capital estadounidense y firmar el Staff Level Agreement. El siguiente paso formal para que entre en vigencia es una reunión del directorio del FMI en donde se dé la aprobación final al acuerdo técnico. Será difícil que todo eso ocurra antes del 31 de julio. Luego, el Fondo entra en receso de verano.

En Buenos Aires, en tanto, Massa siguió hoy las negociaciones desde su celular mientras hizo varias paradas de campaña en el conurbano bonaerense. Igualmente, tuvo dos reuniones relacionadas. A primera hora de la mañana se conectó por zoom con el representante de uno de los países accionistas del FMI reticentes a aprobar el acuerdo, Jörg Kukies, secretario de Estado de la Cancillería Federal alemana. Al mediodía, conversó con el hombre de confianza de Jake Sullivan -uno de los asesores principales de Joe Biden-. Se trata de Mike Pyle, asesor económico internacional del Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos.

Sergio Massa, Gita Gospinath y Kristalina Georgieva

El comienzo de las tratativas actuales fue en abril cuando la segunda al mando del FMI, Gita Gopinath, reconoció la necesidad de reconfigurar el programa como consecuencia de la sequía extrema que afectó al sector agroexportador, principal generador de divisas.

Tras estos encuentros, Massa continuó las negociaciones en varias comunicaciones por zoom con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva. La última fue este domingo cuando se acercaron lo suficiente las posiciones para que el ministro de Economía dé la orden a su equipo de viajar para recalibrar las condiciones de pago de la deuda contraída en 2018 por el ex presidente Mauricio Macri.

EN ESTA NOTA Con Firma fmi Sergio Massa

Leé más notas de Florencia Golender