Leonardo Versalli estaba a cargo del barco que circulaba por el río Uruguay, cerca de Federación en Entre Ríos, cuando algo los impactó y el catamarán comenzó a hundirse.

 

Junto a él estaban sus tres hijos, y un amigo, que también llevaba a sus dos hijos. Todos los niños de entre 7 y 14 años.

 

 

Según el relato de los protagonistas, cuando regresaban por el lago a Federación, cerca de las 21:30 sintieron un golpe en uno de los flotadores de su catamarán y este se comenzó a hundir rápidamente, primero de un costado y luego en su totalidad.

La conservadora a la que se aferraron para salvar sus vidas

Versalli manifestó que la embarcación era segura y el agua estaba tranquila, por lo que creen que un tronco fue lo que rompió el flotador del catamarán.

 

En ese momento se dieron cuenta que una conservadora estaba enganchada por estribor, por lo que la tomaron y la taparon creando una improvisada boya que los mantuvo por varias horas a flote, a pesar de las grandes olas que se forman en el lago.

 

Luego, comenzaron a “nadar y patalear” para acercarse a la costa y cuando fueron encontrados ya se hallaban a unos 1.000 metros de la misma.

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