Your browser doesn’t support HTML5 audio

El semillero santacruceño vuelve a decir presente en las grandes ligas del país. En esta oportunidad, el protagonista es Lautaro Werle, arquero categoría 2008, que tras una breve pero importante etapa formativa en el Atlético Boxing Club de Río Gallegos fue confirmado como nuevo jugador de San Lorenzo de Almagro, uno de los clubes más importantes de la Argentina.

El “Oso”, como lo apodan puertas adentro, llegó a la capital santacruceña proveniente de Puerto San Julián con un objetivo claro: entrenar, formarse y llegar lo más lejos posible. Durante el primer semestre del 2025, no solo se adaptó rápidamente al ritmo de competencia del albiverde, sino que además se ganó un lugar en el plantel de Primera División, alternando entrenamientos con las categorías juveniles.

El joven arquero vivió estos meses en la Pensión, donde el club lo acompañó no solo en lo deportivo, sino también en lo humano. El cuerpo técnico y la dirigencia destacaron siempre su compromiso, su actitud y su temple para afrontar los desafíos que se le presentaron en este proceso. Fue ese rendimiento y esa madurez lo que lo llevó a ser elegido para una prueba con el club de Boedo.

Durante dos semanas, Werle entrenó con los cuerpos técnicos de inferiores de San Lorenzo, donde debió mostrar su capacidad bajo los tres palos frente a otros talentos del país. No desaprovechó la chance: convenció al equipo de captación y, tras superar la etapa evaluativa, fue fichado oficialmente para sumarse al Ciclón.

El posteo de Boxing no escatimó en elogios: “Con trabajo, humildad y sacrificio, se fue ganando la consideración para tener esta oportunidad (…) Lauti empieza una nueva etapa en su carrera deportiva, en un club grande, con la misma ilusión que lo trajo hasta la capital de Santa Cruz”.

Uno de los detalles más valorados por el entorno fue el acompañamiento permanente de Leonardo Mata, presidente de la institución, quien viajó junto a Werle y estuvo presente en el momento del anuncio. Esa presencia resume el espíritu de una institución que, con esfuerzo y visión, trabaja para proyectar a sus juveniles.

Leonardo Mata junto a Lautaro Werle en el predio del Ciclón.

El caso de Werle no es aislado. En las últimas semanas, Boxing ha sido protagonista de varios movimientos similares. Sin ir más lejos, Lautaro Ebel y Simón Rodríguez también fueron confirmados por clubes de AFA en lo que va del año, mostrando una tendencia sostenida en el desarrollo de jugadores.

Río Gallegos se consolida, así, como un polo formativo de talento joven. La estructura de clubes como Boxing, sumada al trabajo constante en divisiones inferiores, empieza a mostrar resultados visibles. Cada vez son más los chicos que, tras destacarse en el ambito local, logran acceder a pruebas en Buenos Aires y dar el salto.

En ese camino, el puesto de arquero no es la excepción. Werle se suma a una camada de guardametas que han surgido de la provincia y que poco a poco se abren paso en el competitivo mundo del fútbol nacional. La formación específica en puestos clave, como la que ofrece el CEFA (Centro de Entrenamiento de Formación de Arqueros), también ha contribuido a potenciar perfiles como el suyo. En esa misma línea se encuentra Thiago Chacón Avilés, ex Boxing Club, actualmente en las filas de Universidad Católica de Chile, quien también dio el salto luego de completar un exigente proceso de formación bajo los tres palos en Río Gallegos.

El presente de Lautaro es prometedor. A sus 16 años, ya se entrena con una de las estructuras más exigentes del país. Su sueño, como el de tantos chicos del interior, empieza a hacerse realidad. Con un largo camino por recorrer, el primer gran paso ya está dado.

Queda por delante la etapa más compleja: adaptarse a un nuevo entorno, competir con los mejores y seguir evolucionando. Pero si algo demostró hasta ahora es que la distancia, el esfuerzo y el sacrificio no son obstáculos, sino parte del recorrido.

Mientras tanto, en Río Gallegos, Boxing celebra con orgullo. El “Oso” dejó huella en su breve paso por el club y su historia, recién comienza.

Leé más notas de La Opinión Austral

Ver comentarios