El secretario de Calidad en Salud del Ministerio de Salud de Nación, Arnaldo Medina, se refirió al caso que involucra al cantante Santiago “Chano” Charpentier en los últimos días, luego de que un policía le disparara en el abdomen mientras padecía un brote psicótico por el consumo de drogas en una vivienda del barrio porteño de Exaltación de la Cruz.

 

El hecho abrió el debate por la adicción a las drogas y la salud mental de aquellos que la padecen, además de cómo se debe intervenir en casos donde haya peligro hacia la misma persona o terceros, y se requiera una intervención involuntaria urgente. Medina, al respecto, dio una explicación sobre el tema a través de un “hilo” de Twitter, donde detalló lo que dice la Ley de Salud Mental que rige en el país.

“La Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657 habilita expresamente a realizar internaciones involuntarias de personas, cuando no sean posibles los abordajes ambulatorios. Para proceder con una internación involuntaria, que a criterio del equipo de salud interviniente exista una situación de riesgo cierto e inminente para la persona con padecimiento mental o para terceros, no se requiere del consentimiento de la persona ni de la intervención judicial previa”, escribió en su cuenta oficial.

 

Asimismo, el viceministro de Salud explicó que “la problemática de la salud mental es de tal complejidad que, como recordó ayer la ministra Carla Vizzotti, el funcionamiento de la Comisión Nacional Interministerial de Salud Mental y Adicciones pasó a la órbita de la Jefatura de Gabinete de Ministros”.

“Desde el máximo nivel gubernamental seguiremos trabajando en una cuestión que, como pocas, es tan marcadamente transversal a las diferentes áreas del Estado. El sufrimiento de las personas con padecimientos psiquiátricos, y el de sus familias, ameritan nuestro mayor esfuerzo”, expresó el funcionario. En esa línea destacó: “Porque lo contempla la Ley, porque ésta abreva en el paradigma de los Derechos Humanos y porque lo indica el más elemental sentido común, nunca la violencia puede ser una alternativa terapéutica ante la crisis de una persona. Nunca“, sentenció.

 

En tanto para cerrar su postura reafirmó: “Cuando una persona tiene problemas de consumo de alcohol o sustancias ilegales, tiene un problema de salud. De allí que bajo ninguna circunstancia la respuesta debe ser desde lo punitivo. No se la debe tratar como delincuente, sino como una persona con un padecimiento mental“, consideró el titular de salud.

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