Generación Zoe, el polémico grupo conducido por el coach ontológico Leonardo Cositorto, que ofrecía exorbitantes ganancias en dólares fue denunciada por presunta estafa. La compañía que en Mendoza reclutó  a unos 1200 miembros, tiene un sumario de la Comisión Nacional de Valores (CNV) y una denuncia por parte de Bitcoin Argentina.

 

Recientemente, un usuario de Twitter dio a conocer que “Zoe Capital”, “Generación Zoe“, “Zoe Cash“, entre otros proyectos del “holding” de Leonardo Cositorto y Maximiliano Batista serían una farsa.

A raíz del tweet, varios seguidores de la cuenta “Osvaldo Beto Mendeleiev” (@BetoMendeleiev), nombre que referencia al personaje de Peter Capusotto, descubrieron varias pistas que podrían complicar aún más a Cositorto y compañía.

En primer lugar, publicaron una publicidad de la organización que promete retornar en dólares del 100% en solo tres meses, inversiones de entre USD 1.500 y USD 30.000.

Además de que una rentabilidad de este nivel es imposible de garantizar, la Comisión Nacional de Valores (CNV) aclaró que “Zoe” no está autorizada para participar de la industria financiera.

Inmediatamente, los usuarios de la red social asociaron la promesa con la modalidad de las estafas piramidales. “Esta desesperación radica en que si no consiguen más gente (nuevos estafados) para sostener la base de la pirámide, los que están arriba (estafados anteriores que se convierten en estafadores) no cobran y se derrumba el Ponzi. No creo que duren muchos meses más”, expresó “Beto”.

Posteriormente, se dio a conocer que “Zoe Cash”, la criptomoneda del “Grupo Zoe” que subió cerca de un 38% en dólares en un solo día, no se puede vender debido a que se trata de un token congelado, por lo que su precio es completamente ficticio dado que no existe oferta que complemente la demanda.

En el primer hilo de Twitter que armó “Beto” exponiendo públicamente la potencial estafa que habría detrás de Zoe, se destacó que Leonardo Cositorto habría comprado personalmente una mina de oro para respaldar sus criptomonedas.

Ahora, de acuerdo a una fuente del twittero, esta mina de oro sí existiría, pero tendría un tamaño tan pequeño que no serviría para extraer lo requerido.

Si de por si la situación ya era sospechosa, también salieron a la luz expedientes históricos de la justicia que muestran múltiples denuncias por estafa acusando a Leonardo Cositorto.

El twittero también reveló que Cositorto engañó a sus clientes y seguidores al afirmar que la compañía contaba con presencia publicitaria en el automovilismo pero se trataba de imágenes editadas.

Por último, mostró una captura de pantalla en la que una fuente anónima afirma que “Zoe” cuenta con oficinas en Núñez, lugar en donde un encargado de los pagos habría expresado: “Se me viene mucha gente a cobrar y no hay dólares. Muchos esperan tres o cuatro horas hasta pagarles y le entrego un recibo de esos que se usan de presupuesto que podés comprar en cualquier librería de Once”.

Tras el escandalo por la difusión de ofertas de inversión con ganancias inusualmente elevadas en dólares, la Comisión Nacional de Valores (CNV) abrió un sumario y anunció que emitiría una alerta internacional ante una posible intermediación irregular en el mercado de capitales.

Por su parte, este jueves la ONG Bitcoin Argentina presentó una denuncia penal contra Zoe ante la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac). La acusación es por presunta estafa, captación de ahorros sin autorización y manipulación de mercado.

Desde Zoe niegan todo esto y aseguran que están haciendo lo necesario para estar en regla con el Estado argentino. Sin embargo, el señalamiento de la organización vinculada al mundo crypto es un golpe particularmente duro, si se tiene en cuenta que una de las cosas que ofrece la firma cuestionada es, justamente, “formación en criptomonedas”.

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