“Nadie está preparado para morirse que literalmente fue lo que me pasó. Mi hoja clínica dice muerte súbita, que fue lo que pasó estuvieron 10 minutos tratando de reanimarme”, dijo Jorge Rial este lunes. En su paso por Radio 10, donde conduce Argenzuela, saludó a sus colegas y dio detalles del dramático momento que debió atravesar en Bogotá, Colombia, luego de sufrir un paro cardiaco.
“Fueron horas muy angustiantes las que pasamos todos. Fue una situación extrema que me atravesó el cuerpo, ahora estoy haciendo las primeras salidas. La cabeza me la rompió en mil pedazos”, expresó.
Rial aseguró que tuvo un paro cardíaco con muerte súbita e intentaron reanimarlo a lo largo de 10 minutos: “Me dieron tres descargas eléctricas, de hecho todavía me duele la caja toráxica. Un enfermero se trepó arriba mió y se negó a dejarme ir”.
“Todavía no lo puedo asumir, parece que estoy contando la historia de otro y no la mía. Realmente fue terrible”, afirmó. A su vez, remarcó: “Hay cosas que pasaron en el medio, lo tengo que armar, necesito ir a terapia, porque pasaron cosas muy fuertes, imágenes muy fuertes”.

Sobre cómo comenzó este preocupante episodio, relató: “Me desperté con un dolor de pecho muy agudo a las 8:30 de la mañana y a la media hora decidí llamar a mi cobertura médica e ir rapidamente al sanatorio”.
“Soy un tipo muy cabeza dura y no le presto atención a eso, sin embargo sentí que algo me iba a pasar. Por suerte, llegué, me atendieron y me llevaron a hacer los primeros análisis”, comentó, al tiempo que añadió: “El electrocardiograma me dio bien, pero yo sentía que algo pasaba. Efectivamente, a los 20 minutos el médico viene y me dice ´tengo malas noticias, está atravesando un infarto, le tenemos que poner un stent´“.
Luego de recibir el diagnóstico, recordó que inmediatamente dejó los números de teléfonos de sus hijas Rocío, Morena y de su médico Guillermo Capuya para que le avisaran de la situación. “Me llevan a la UCI para prepararme y en esa cama me morí. Me estaban haciendo el electro de rutina y ahí me fuí. Se me fueron los ojos para atrás y empecé a ahogarme, después no me acuerdo más. Estuve 14 horas sedado, no era coma inducido.”, indicó.
“Escuchaba todo lo que decían alrededor mío, se preguntaban de todo: si había tomado cocaína o si había hecho algo. Yo intentaba moverme y hacer contacto con la enfermera para decirle ‘estoy acá, no me dejen ir’. Era el caso más complejo de ese lugar y luego fui como una atracción porque estuve 10 minutos muerto”, declaró.
Asimismo, en uno de los momentos más emocionantes de su relato, Rial contó cómo se siente la muerte: “No es dolorosa, es un lugar cálido. El dolor es el que dejás pero le quiero decir a todos que es un momento glorioso, es cálido, es lindo, te atrae, te lleva. Escuché la voz de mi nieto que me decía ‘dale tata, dale’. Yo lo escuchaba y me desesperaba”.
“Hay algo ahí, yo lo vi, hay algo de verdad, y no fue desagradable. No digo que le perdí el miedo a la muerte, pero tengo una mirada distinta. Me di cuenta que no es tan jodido, doloroso, se lo digo para aquellos que pasen por esto. Salvo que pasen por una enfermedad complicada. Calorcito hermoso, calidez, sentí eso”, concluyó.
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