Este martes, Juan Schiaretti y Juan Manuel Urtubey anunciaron que serán candidatos a presidente en las elecciones de este año, dentro de “un espacio político superador, por fuera de la grieta”. Fue anunciado luego de un almuerzo que ambos compartieron durante del armado de alianzas.
Según se detalló en un comunicado, ambos “expresaron su decisión de ser candidatos a presidente y competir dentro de ese nuevo espacio, incluyendo a quienes quieran integrar esa propuesta peronista no kirchnerista”.
Tanto Urtubey como Schiaretti destacaron que no irán “a ninguna PASO con el kirchnerismo”. “Ni con los K ni con el Frente de Todos”, remarcaron. Paralelamente, hablaron del escenario nacional e internacional y del contexto económico que atraviesa el país.
El futuro político del gobernador cordobés se trataba de una incógnita hasta ahora ya que no puede reelegir en su provincia, donde propone a Martín Llaryora para sucederlo. Durante el 2022 mantuvo reuniones con distintos referentes de Juntos por el Cambio, como Martín Lousteau y Facundo Manes. Particularmente, se especuló con una posible fórmula presidencial junto al neurólogo con Schiaretti como vice, pero nunca hubo una confirmación oficial.
A mediados del 2022, cuando Manes mantenía números prometedores en las encuestas, Schiaretti lo invitó en reiteradas oportunidades para reunirse en su provincia. Ambos coincidían en la necesidad de superar la dicotomía Cristina Kirchner–Mauricio Macri y en deber crear una “nueva mayoría” que incluya otros espacios. Esa alianza perdió fuerza luego de que el neurólogo bajara su perfil mediático a raíz de las críticas que lanzó a Macri.
No se trata de la primera vez que Schiaretti y Urtubey intentan armar un espacio por fuera de la grieta. En 2019, junto con Sergio Massa y Miguel Ángel Pichetto, integraban Alternativa Federal, un espacio con los mismos objetivos que anuncian hoy pero que acabo frustrado cuando el tigrense se sumó al Frente de Todos.
El 18 de mayo de 2019 Cristina Kirchner marcó el principio del fin de Alternativa Federal. Ese sábado por la mañana comunicó que integraría la fórmula presidencial de su espacio pero competiría como candidata a vicepresidente. El primer lugar sería para Alberto Fernández.
Cuatro días después del anuncio de Cristina, se encontraba prevista una cumbre entre los principales dirigentes que habían quedado parados en la vía del medio: Massa, Urtubey, Pichetto, Schiaretti, Lavagna, Lifschitz y Stolbizer.
Allí, negociaron un cónclave para acordar un proyecto común. La negociación se cayó menos de 24 horas después de haberse cerrado. El foco del conflicto esta vez fue Roberto Lavagna.
Los fundadores de Alternativa Federal, de los cuales tres eran precandidatos presidenciales, querían dar por cerrada la discusión por la forma de elegir los candidatos. Ellos habían acordado utilizar el mecanismo de las PASO y Lavagna quería acordar una fórmula por consenso. La fricción que generó esa discusión hizo volar por los aires lo que quedaba de la tercera fuerza. A partir de ese momento el ex ministro de Economía dio por cerrada la negociación con la fuerza federal y se abocó a trabajar en su propia candidatura.
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