Your browser doesn’t support HTML5 audio

El presidente Javier Milei generó un escándalo este viernes al promocionar en sus redes sociales el token $LIBRA, que resultó ser una estafa de tipo Rug Pull.

Tras la publicación de Milei y casi de manera instantánea, la criptomoneda experimentó un furor inicialalcanzando un pico de 4.978 USD. Las preocupaciones y alarmas se encendieron cuando, poco después, se desplomó abruptamente a 0,99159.

Esta maniobra fraudulenta permitió que menos de 10 personas se hicieran con una suma cercana a los 80 millones de dólares en pocas horas, dejando a miles de inversores con activos sin valor.

Aunque Primero se creyó que la cuenta del mandatario había sido hackeada, luego su entorno lo desmintió y lo defendió, y finalmente él mismo reconoció que había promocionado la cripto “sin estar interiorizado”.

¿Qué es un rug pull?

El rug pull es una estafa financiera en el sector de las criptomonedas, especialmente en los proyectos de finanzas descentralizadas (DeFi). Consiste en la creación de un token que se promociona agresivamente para atraer inversores, generando una subida artificial en su valor. Sin embargo, cuando los desarrolladores han recaudado suficiente dinero, retiran la liquidez del proyecto, dejando a los inversores con tokens sin valor.

Modus operandi de un rug pull

Los rug pulls siguen un patrón predecible:

  • Creación del token: Se lanza un nuevo criptoactivo con promesas de altos rendimientos y tecnología innovadora.
  • Marketing engañoso: Se promociona el token a través de redes sociales, influencers y anuncios publicitarios.
  • Atracción de inversores: Se generan expectativas irreales y se ofrecen incentivos para que más personas inviertan.
  • Retiro de liquidez: Una vez que se ha recaudado suficiente dinero, los creadores vacían los fondos, provocando la caída del token.
  • Desaparición: Los estafadores eliminan sus perfiles y dejan a los inversores con activos sin valor.

Tipos de rug pulls

Existen varias formas en las que los estafadores pueden ejecutar un rug pull:

  • Robo de liquidez: en este caso los desarrolladores impulsan a sus víctimas a invertir en sus monedas más estables o en el proyecto, creando expectativa en las redes sociales. Luego escapan con el dinero que invirtieron las víctimas, quienes quedarán con los tokens sin valor y un pool de intercambio vacío.
  • Falsos inversores: aquí los desarrolladores crean un proyecto supuestamente prometedor que parece tener varios inversores, lo cual atrae a personas menos experimentadas. Sin embargo, los creadores son los dueños de casi todas las billeteras que contienen estas monedas, lo cual les permite vender una gran cantidad de activos en poco tiempo. Luego de elevar el precio de la criptomoneda y ganarse la confianza de las víctimas, los desarrolladores venden su parte de manera repentina, lo cual provoca que el precio del activo baje fuertemente. Si bien esto en principio no es una estafa, hay que tener en cuenta que este tipo de proyectos se hacen específicamente para engañar a inversores desprevenidos.
  • Manipulación del proyecto: con algunos conocimientos técnicos sobre sitios de Exchange y criptoactivos, los desarrolladores pueden impedir a los inversores la venta de los activos, sin necesidad de informarlo previamente. Luego de inflar el precio del criptoactivo los desarrolladores intercambian todas las monedas y desaparecen con el dinero de los inversores.

Los proyectos diseñados como estafas rug pull no siempre son obvios. Si bien encontraremos casos en los cuales el proyecto mostraba señales claras de ser un engaño (como la promesa de grandes ganancias), no siempre es así. De hecho, gran parte de los criptoactivos que terminaron siendo una estafa de rug pull fueron presentados como proyectos de inversión sólidos y no como oportunidades para obtener ganancias rápidas.

Según Chainalysis, las estafas de rug pull son una forma de delito nueva que ha crecido mucho en los últimos años. De hecho, y durante el año 2021, calculan que al menos 2800 millones de dólares fueron sustraídos de víctimas bajo este modelo, siendo el 37% del total de dinero obtenido por estafas dentro del mundo de los criptoactivos.

Este tipo de estafa prevalece en el submundo de proyectos DeFi por su sencilla ejecución. Teniendo los conocimientos adecuados en materia técnica, es una estafa fácil y barata: solo basta crear tokens y ofrecerlos en Exchanges descentralizados, sin necesidad de una auditoría de código ni similares que respalden la veracidad del proyecto.

Casos emblemáticos de rug pull

Rug pull de token SQUID

A fines de octubre de 2021, se lanzó un token llamado SQUID, basado en la popular serie surcoreana El Juego Del Calamar. Este activo, según sus desarrolladores, sería parte de un juego play-to-earn. Esto, combinado con la publicidad tan agresiva que lanzaron sus creadores, llevaron que el token suba explosivamente su valor de 0,01 a 2800 dólares en menos de tres semanas.

El mismo día que el token alcanzó el máximo, los inversores comenzaron a reportar problemas para vender las monedas. Más tarde, su valor se desmoronó, la cuenta de Twitter oficial “Squid Game token” desapareció, al igual que su cuenta en Medium, y su sitio web oficial también dejó de funcionar.

Se estima que los estafadores se hicieron con un total de 3.3 millones de dólares.

Rug pull del exchange Thodex

Si bien Thodex fue una plataforma de Exchange y no una criptomoneda, está dentro de las estafas de tipo rug pull más exitosas de la historia.

Desde 2018 Turquía enfrenta una crisis financiera que provocó una caída en el valor de la lira turca y el aumento de la inflación, lo cual llevó a que la población comenzara a tomar interés por las criptomonedas. Por su parte las plataformas de Exchange más populares comenzaron a promocionarse por redes, radios y programas de televisión, y rápidamente se convirtieron en los sitios más visitados del país. Entre estos sitios se encontraba Thodex, un Exchange de criptomonedas que comenzó a operar en 2017 y que utilizaba la imagen de distintas celebridades y sorteos de artículos de gran valor como publicidad.

Este sitio cosechó una popularidad bastante grande, contando con casi 400 mil usuarios dentro de la plataforma. Sin embargo, durante abril de 2021 los usuarios comenzaron a reportar problemas para vender sus criptomonedas y retirar su dinero, lo que llevó a la compañía a responder en Twitter que se trataba de un cierre temporal para labores de mantenimiento. Luego de unos días, su dueño fue visto abandonando el país.

Si bien no hay cifras exactas, se estima que las pérdidas fueron de aproximadamente 2 mil millones de dólares.

El caso de Luna Yield

Durante agosto de 2021 un nuevo proyecto bajo el nombre Luna Yield fue anunciado en la plataforma Solpad, un mercado financiero descentralizado basado en Solana. La combinación de factores como el respaldo que representa la popularidad de la blockchain Solana, la publicidad en redes sociales y la cantidad de usuarios interesados en “bitcoin”, llevó a una recaudación de casi 7 millones de dólares en este nuevo proyecto por parte de los desarrolladores.

El proyecto, sorprendentemente tanto para los usuarios como para quienes administran Solpad, no duró mucho tiempo en línea: apenas dos días después, los desarrolladores detrás de Luna Yield vaciaron los fondos de liquidez y cerraron sus perfiles oficiales en redes sociales. Ni bien Solpad detectó este movimiento bloqueó las transacciones, pero ya era demasiado tarde: los creadores del fraudulento proyecto lograron hacerse con el dinero de los inversores. Días después, Solpad compensó a los afectados y les dio el 60% del dinero invertido inicialmente en Luna Yield.

¿Cómo evitar caer en un rug pull?

Para protegerse de estas estafas, es importante seguir algunas recomendaciones:

  • Investigar el equipo: Asegurarse de que los desarrolladores son reconocidos en la industria.
  • Evitar promesas exageradas: Si un proyecto garantiza rendimientos desmesurados, es probable que sea fraudulento.
  • Observar la liquidez del proyecto: Verificar que existan auditorías y un respaldo financiero real.
  • No dejarse llevar por la publicidad: Muchos estafadores utilizan influencers y celebridades para promocionar proyectos fraudulentos.

Leé más notas de La Opinión Austral

Ver comentarios