En septiembre saldrá al aire la segunda temporada de Bake Off, el certamen que busca al mejor pastelero del país. El programa tendrá nuevamente como conductora a Paula Chaves pero el jurado tendrá una nueva conformación.
Tras la salida de Telefe de Christophe Krywonis, Damián Betular y Pamela Villar completarán el jurado con la participación de la chef y empresaria gastronómica, Dolli Irigoyen.
Irigoyen, de 69 años, cuenta con una amplia trayectoria en el rubro. Tenía un poco más de 20 años cuando tuvo su primer emprendimiento de pastelería en General Las Heras, su pueblo natal. Tiempo después estuvo al frente del restaurante del club social de Las Heras y más adelante, fue contratada por Carrefour para el armado de la pastelería y la fábrica de pastas de la sucursal de San Isidro.
Viviendo en CABA comenzó a dictar clases de cocina. Más adelante tendría su debut televisivo en Canal 7 y después en la señal de cable Utilísima.
En la década de los noventa, Irigoyen expandió su negocio gastronómico y abrió dos restaurantes en Buenos Aires. Casi llegando al nuevo milenio, fue invitada a formar parte del canal de cable El Gourmet, que le valdría el reconocimiento en toda Latinoamérica.
La chef ha recibido innumerables premios, entre los que se destacan el Santa Clara de Asís y el Martín Fierro al mejor programa de cable de cocina de la televisión argentina. Además, es autora de las colecciones “Dolli cocina para todos” y “Dolli Irigoyen en su cocina”, que recibió el Gourmand Award al Mejor Bookazine del Mundo. Actualmente dirige Espacio Dolli, un taller creativo en el cual trabaja junto con su equipo de jóvenes cocineros en el desarrollo de nuevas propuestas gastronómicas.
En el ámbito internacional, Irigoyen presidió dos veces el Bocuse d’Or y es miembro de la Académie culinaire de France por su aporte a la gastronomía latinoamericana.
Su más reciente aparición en un programa de canal de aire fue en MasterChef Celebrity: After Hour.
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