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*Por Irene Stur

Este domingo, el conflicto bélico entre Irán e Israel volvió a resonar en las noticias del mundo, luego de que los ataques israelíes alcanzaran Teherán, la capital iraní, en una nueva escalada del enfrentamiento. En paralelo, las sirenas antiaéreas, volvieron a sonar en Tel Aviv, Jerusalén, y otras localidades del norte del norte de Israel.

Además de la preocupación por este nuevo foco de tensión en Medio Oriente, por las implicancias que tiene desde lo humanitario, desde lo geopolítico, su impacto en lo económico ya se vivencia y puede profundizarse.

Es que Irán tiene la tercer reserva de petróleo del mundo y tiene capacidad de producir, un promedio, de 4 millones de barriles diarios.

Pero el peligro latente si el conflicto que, varios especialistas anticipan, puede extenderse en el tiempo, no es tanto sobre la capacidad de producción de Irán, sino sobre las represalias que la acción bélica pueda provocar. No solo por un recrudecimiento de sanciones al país musulman,  sino si las acciones que éste pueda tomar y que serían de alto impacto, como un posible bloqueo al Estrecho de Ormuz, una vía por la que pasa la tercera parte del petróleo a nivel mundial.

Soldado israelí observa el estado de los edificios luego de los bombardeos de Irán.

Escenarios

Ya el viernes, el precio del barril registró un alza de más de 7% como no sucedía desde 2022, cuándo se desató la guerra entre Ucrania y Rusia.  Si bien algunas consultoras consideraron que la suba podría ser pasajera y de corto plazo, la reiteración e intensificación de los ataques entre Irán e Israel, durante el fin de semana, lo pone en duda.

Hay un signo de interrogación sobre la cantidad de tiempo en que persistirá un crudo en valores superiores a los que habían sido pronosticados para este año (sobre los USD 65), antes de que llegue, la necesaria reacomodación del mercado.

Cabe recordar que el viernes, los precios del Brent con vencimiento al mes próximo se dispararon hasta un 13%, en una parte de la jornada. Pero en el mercado de Futuros, también se observaron precios en alza para movimientos con contratos a plazos más prolongados.

Pareciera que el mercado se prepara para un escenario de menos suministros de petróleo  en el corto y medio plazo ante las expectativas, precisamente, de que exista un recorte en el crudo que produce Irán (por los ataques) o que los barcos petroleros que viajan por el Estrecho de Ormuz puedan sufrir algún contratiempo.

Precios en alza

El barril de Brent, de referencia en Argentina, cerró el viernes a USd 74,23, casi 5 dólares más que el día anterior, en el Mercado de Futuros con entrega a finales de junio y con una alta demanda. La mirada está puesta en la apertura de los mercados este lunes, luego de un fin de semana, dónde la escalada bélica se intensificó por parte de ambos países.

Uno de los organismos que sirven de consulta a la hora de las proyecciones en el mercado de los hidrocarburos, el JP Morgan, en su reciente informe, decidió mantener su previsión de un Brent que se movería en torno a lo proyectado, en el promedio final y que cerraría un 2025, con un barril de crudo en torno a los USD 65 y para 2026, ese valor de referencia bajaría a los USD 60.

Aunque admite que si el enfrentamiento entre Irán e Israel no encuentra el canal de diálogo y se adoptan medidas extremas, como un eventual cierre del Estrecho de Ormuz,  el precio del barril podría dispararse hasta los USD 130 dólares. Una posibilidad latente pero por ahora lejana, al esperarse que haya respuestas a las negociaciones diplomáticas que desde varios países se comenzaron para por paños fríos al conflicto.

Una disparada del barril a esos niveles, pondría en jaque, los esquemas energéticos de muchos países. Si bien en la Argentina podría ser un aliciente para el desarrollo de las cuencas maduras, con la liberación del mercado interno, el impacto en el precio de los combustibles sería muy fuerte.

Lejos del diálogo


Aunque por ahora no parecer tener efecto. De hecho, el primer ministro israelí,
Benjamin Netanyahu, desde Bat Yam declaró este domingo: “Irán pagará un alto precio por el asesinato premeditado de civiles, mujeres y niños”, dando cuenta de que no habrá freno por el momento. 

Desde Teherán, el presidente Massoud Pezeshkian advirtió que la “respuesta militar será aún más contundente” si los ataques continúan.

Donald Trump, Vladimir Putin y Xi Jiping sentaron posición sobre el conflicto Irán – Israel.

 Los países alzan su voz

Es que desde Donald Trump hasta Xi Jiping, pasando por el presidente Vladimir Putin, buscan con diversos modos y posturas, tratar de encausar el conflicto.

Desde su red Truth Social, Donald Trump insistió en que Israel e Irán deberían alcanzar un acuerdo. “Lo harán, tal como logré que lo hicieran India y Pakistán”, escribió. “Usaré el comercio con Estados Unidos para infundir razón, cohesión y cordura en las conversaciones con dos excelentes líderes que supieron tomar una decisión rápida y ¡PARAR!”.

En tanto que el presidente de China, Xi Jiping, apuntó a Israel y protestó ante  el Consejo de Seguridad de la ONU este viernes, donde exigió a Israel suspender sus operaciones contra Irán (algo que no pasó).  Fu Cong, embajador chino ante Naciones Unidas, declaró que los ataques israelíes —incluida la Operación León Ascendente— violan el derecho internacional y amenazan las negociaciones sobre el programa nuclear iraní. Y alertó sobre las consecuencias que ello implicaría.

Desde Rusia, Vladimir Putin, también condeno el ataque israelí, a uno de sus países aliados, como Irán, al tiempo que expresó su profunda preocupación por la posible escalada del conflicto.

El mandatario ruso conversó con Donald Trump y le habriá informado al estadounidense sobre los contactos diplomáticos que ha mantenido con los líderes de Israel e Irán en un intento por mediar en la crisis.

Paralelamente, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan mantuvo comunicaciones con el príncipe heredero de Arabia Saudí, donde enfatizó que el gobierno de Netanyahu en Israel, representa “la mayor amenaza para la estabilidad y seguridad regional“, demostrándolo una vez más con su ataque contra Irán.

Por la diplomacia

Y advirtió: “La región no puede tolerar una nueva crisis ni una guerra devastadora”, al tiempo que insistió en que la disputa nuclear solo puede resolverse mediante negociaciones diplomáticas.

Desde América Latina, el gobierno de Uruguay emitió un comunicado oficial en el que expresó su “gran preocupación por la peligrosa escalada militar entre Israel e Irán”, señalando que la situación “amenaza con agravar una región ya extremadamente delicada”.

Pidió “evitar acciones que puedan desestabilizar aún más a la región“, al tiempo que invitó a que “se retomen los canales diplomáticos”.

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