Stella Morales tenía 27 años cuando como enfermera profesional estuvo abocada a la tarea, junto a 13 mujeres más, de atender a los soldados heridos de la Guerra de Malvinas.

“La primera orden de destino fue Malvinas, pero después hubo una contraorden y el Hospital reubicable se armó en la cabecera de pista del aeropuerto de Comodoro Rivadavia”, recordó en diálogo con LU12 AM 680 Río Gallegos.

Derechos

En el marco del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, la veterana de guerra se refirió al reconocimiento y a la lucha. “Pasaron tanto años para entender que la mujer tiene que tener los mismos derechos que los varones. Y en este caso, recordando esta guerra tan triste para la Argentina y tan inútil, que se les haya olvidado la labor de la mujer enfermera es muy triste y lamentable”, expresó.

“Parece ser que para que reconozcan a la mujer tenemos que levantar la voz, tenemos que salir a tomar una calle”, señaló y admitió que “me pone mal que tengamos que seguir reclamando este derecho que nos corresponde, estuvimos en Comodoro Rivadavia atendiendo y conteniendo a los heridos que llegaban de las islas, de este infierno, dándoles esa mano de contención que era necesaria en ese momento”.

Las enfermeras en un recorte de la época.

“Hicimos las evacuaciones trasladando soldados heridos, llevándolos a diferentes destinos y también a los que fueron prisioneros, cuando los liberaron fuimos a recibirlos. Creo que estuvimos bastante empapadas de todas las vivencias, de lo que sentimos en ese momento”.

Las 14 mujeres eran enfermeras profesionales y es lo que Stella destaca “estábamos preparadas profesionalmente para atender y contener a los heridos que llegaban”.

El trauma me hace guardar profundamente los recuerdos más tristes

A la hora de recordar, sostiene que “los recuerdos son tan tristes y tan dolorosos que muchos de ellos se han guardado en el fondo de mi cerebro al no recibir esa contención todo ese pos trauma me hace guardar muy profundamente los recuerdos más tristes”.

En ellas, los soldados que volvieron de la guerra encontraron “una mujer para contenerlos y escucharlos, era lo que ellos necesitaban. Que una mujer estuviese ahí para que pudiesen confiar esto que seguramente no se lo iban a decir a un jefe, se lo tenían que decir a una mujer llamá a mi mamá y decile que estoy bien, ese comentario solo se lo podés decir a una amiga”.

“Los señores superiores, de alto machismo, seguramente reaccionaban violentamente ante eso, ellos decían que los soldados estaban con el ánimo muy alto. Justamente, no podían decir tengo miedo, extraño mi vieja, estaban en un ámbito tan machista… en 1982 un varón no podía llorar, no podía sentir miedo, eso no era de macho”, reflexiona.

Sobre aquellos jóvenes destaca que fueron “unos leones que estuvieron en ese lugar sin que se les hubiese cruzado por la cabeza, defendiendo la Patria. Los que quedaron allá, esos realmente son los héroes, los valientes estuvieron y pudieron volver con vida”.

“A los soldados que regresaron ni siquiera se les hizo una contención psicológica”, apuntó y agregó que “para nosotras fue directamente el olvido total y eso es lo que le pasa a las mujeres y hasta el día de hoy tenemos que seguir levantando la bandera, porque a veces dicen ustedes no estuvieron en la guerra”.

Reynoso, Arce, Escudero y con el estandarte, Stella Morales.

Debieron recibir a los soldados y a las mujeres como corresponde, no ocultarlas, no decir como decían los loquitos de la guerra y las mujeres directamente NN, olvidadas, maltratadas. Cuando levantamos la bandera que comenzó Alicia (Reynoso) en el 2010, fue vapuleada”, recordó.

Después de Alicia Reynoso, Stella fue la segunda enfermera en ser reconocida tras un proceso judicial que se extendió por siete años.

Finalmente, se convirtió en Veterana de Guerra de Malvinas luego de que la Cámara Federal de la Seguridad Social reafirmó un fallo de primera instancia del 2019 que la reconocía plenamente como tal.

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