El plantel de Hispano Americano, tras cinco meses de competencia, llegó a Río Gallegos para quedarse durante casi veinte días. Las semanas incluirán entrenamientos en doble turno, mientras la Liga Nacional transcurre su receso por las fechas FIBA de cara a la AmeriCup 2022. Para la gran mayoría de ellos, se trata de la oportunidad de conocer la capital santacruceña.

 

Aún con alguna gota de sudor, Bruno Sansimoni saludó y se sentó para charlar con La Opinión Austral en el estadio Tito Wilson. “Teníamos ganas de visitar la ciudad. La gente acá es muy atenta, nos vienen tratando de diez. Ya tuvimos un poco de descanso para recorrer, ahora estos días nos sirven para ponernos bien físicamente”, comentó el base de 24 años. Y siguió: “El balance a esta altura es muy bueno. Nos hemos enfocado mucho en los partidos, este es un tiempo para ponernos bien y pensar en lo que debemos mejorar”.

 

El plantel del Celeste trabajará en el Tito Wilson y en el CEPARD. Foto: José Silva / La Opinión Austral

Ahora en el sur

Después de un largo tiempo en Buenos Aires, en contexto de “burbuja” sanitaria, los integrantes del plantel Celeste se subieron al avión para llegar a Santa Cruz: “Estuvimos dos o tres meses juntos todo el día, se hace difícil, pero por suerte hay una buena relación y eso lo hace llevadero. Por suerte, este es un plantel muy unido. Ya con el correr de los partidos, fuimos ganando en nivel de competencia, sobre todo este año”.

 

De todas formas, retrocedió algunos meses y recordó los tiempos sin la naranja rodando: “Es cierto que fue difícil porque estuvimos casi siete meses sin pisar una cancha de básquet, la mayoría nos las arreglábamos para entrenarnos como fuera durante la pandemia. En mi ciudad –Olavarría– no estaba permitido, había que entrenar en casa o en una plaza”.

Nos dolieron un poco las últimas dos derrotas, pero seguimos en camino

Burbuja de liga

Sin gente, en múltiples horarios, lejos de sus estadios, la pandemia creó un escenario nunca antes visto para el desarrollo de la Liga Nacional, que se disputa en su totalidad entre los estadios de Obras Sanitarias (El Templo del Rock) y Ferro (Estadio Héctor Etchart). En ese sentido, el exjugador de Boca se refirió: “La burbuja sanitaria fue algo totalmente nuevo, a partir del correr de los partidos nos fuimos acostumbrando. Jugar sin público es muy distinto. No existen las localías y hay distintos horarios de partido, estábamos acostumbrados a la noche y hoy jugás a la hora que te toque. Seguro que se siente la falta de la gente, pero los veinte equipos estamos en las mismas condiciones”.

Recta final

Con Hispano en el puesto once de la Liga, producto de catorce triunfos y dieciocho derrotas, los hombres del conjunto santacruceño coinciden en sus aspiraciones en la máxima categoría del básquet argentino: “El objetivo que nos pusimos es entrar entre los primeros doce. Nos dolieron un poco las últimas dos derrotas, pero seguimos en camino”. Además, agregó: “Estos días van a servir para entrenar y encarar los últimos seis partidos que nos quedan para conseguir entrar a los playoffs”.

Me hablaron muy bien de Hispano y de su gente. Lo estoy comprobando

Responsabilidad

Por último, el nacido en Olavarría, surgido en Quilmes de Mar del Plata, se refirió a su llegada al Celeste para esta temporada: “Estoy muy contento de estar acá. Hablé con compañeros que habían pasado por el club y me hablaron muy bien de Hispano, lo estoy comprobando. A nivel personal, es mi primer año como mayor, eso es un desafío para mí porque arranqué desde el inicio y con otras responsabilidades. Espero estar a la altura”.

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