Your browser doesn’t support HTML5 audio

El Golfo San Jorge ha dado muestras de estabilidad en su producción en los últimos tiempos, pero está lejos de pensar eso como un punto de partida para su recuperación. Lograrlo implicará fuertes inversiones en técnicas de recuperación secundaria y terciaria, que hoy no están.

Las empresas apuntaban a una ley de Promoción que justifique esas inversiones. La ley de Cuencas Maduras, girada por la actual gestión al Congreso, iba en ese sentido. Pero por el momento no está claro cuál será la política, en ese sentido, del futuro gobierno de Javier Milei ni el futuro de la norma que ni siquiera comenzó a ser tratada.

Un dato positivo para la Cuenca fue la postura, de la que ya diera cuenta La Opinión Zona Norte, en su edición de ayer, de la confirmación que el futuro presidente de YPF, Horacio Marín le hiciera a los gobernadores electos Claudio Vidal Ignacio Torres, de que la intención es profundizar la inversión en el convencional, como parte del plan que los Libertarios pretenden para que la petrolera nacional “recupere valor”, antes de ser privatizada.

Como yacimientos maduros, las áreas del Golfo tienen altos costos operativos a lo que se suma, hoy, la “disputa” con Vaca Muerta por los equipos de perforación. Y eso agrega presión sobre un sector productivo clave tanto para las economías de Chubut como para la de Santa Cruz, a partir de la producción hidrocarburífera.

Producción

Cabe recordar que en octubre, de acuerdo a los datos públicos por la Secretaría de Energía, la cuenca del Golfo San Jorge produjo un total de 202.807 barriles por día (bbd) de petróleo. Esto significó una leve suba del +0,17% respecto a setiembre. Aunque, lamentablemente, refleja una merma de -1,48% respecto de igual mes de 2022. Del total producido por la cuenca, del norte de Santa Cruz sólo se aportaron 65.600 bbd, aproximadamente.

El comportamiento por empresa es variado. Mientras CGC, la más “nueva” en el Golfo, luego de adquirir los activos de Sinopec en el norte de Santa Cruz mostró un recupero de 2,5% intermensual, la petrolera nacional registró una caída superior al 18%.

El yacimiento Diadema, en la provincia de Chubut, es un ejemplo de lo que se puede lograr con la aplicación de la recuperación terciaria. A partir de los polímeros, el bloque que tiene varias décadas de producción, produce un promedio de 11.453 barriles por día. La operadora CAPSA (titular de la concesión) también forma parte de un holding que contiene a Capex, una firma que administra los yacimientos que dejó Sinopec en Chubut, que le suma 6369 barriles más.

Finalmente, en Chubut, Tecpetrol, de dónde surge el futuro presidente de YPF en la gestión Milei, mantiene el foco de su negocio del petróleo convencional en El Tordillo. En octubre los resultados no fueron positivos, toda vez que la producción de la compañía en la cuenca tuvo una caída de 4,29% intermensual.

Leé más notas de Irene Stur

Ver comentarios