Por Pablo Manuel

La Convención Provincial de la Unión Cívica Radical, realizada la semana pasada en Río Gallegos, no sólo mostró la “preocupación por la situación provincial y nacional” de la oposición, sino que -fundamentalmente- empezó a dirimir quiénes serán sus referentes de cara al proceso preelectoral que se avecina.

Como viene anticipando La Opinión Austral, la diputada nacional Roxana Reyes parece ir ganando terreno para encabezar una fórmula para competir por la gobernación de Santa Cruz. Lo que tiene que consolidar no es la idea, ya instalada hace meses, sino el consenso en el resto de la UCR. Si supera esa instancia, casi no tiene rival dentro del partido centenario.

El otro factor es Eduardo Costa. Luego de la “desaparición” política durante dos largos años, tras el duro tercer puesto en las generales del 2019, el senador nacional desempolvó algunas de sus viejas consignas donde insiste en la falta de trabajo y de oportunidades. Nada nuevo bajo el sol.

Diputada Roxana Reyes.

“Hasta en eso hoy Reyes parece posicionarse mejor”, dicen los correligionarios. La legisladora se ve más firme en sus discursos, más vehemente pero también más a tono con la propuesta de la cúpula de Juntos por el Cambio a nivel nacional. Tanto es así, que la eligieron para representarlos en el Consejo de la Magistratura.

Costa no se bajó de la carrera, pero sugirió algunos nombres que podrían representar (¿mejor que él?) la idea de la oposición. Además de Reyes nombró a Daniel Gardonio, intendente de San Julián y presidente de la UCR de Santa Cruz; a Leonardo Roquel, concejal de Río Gallegos que hizo una muy buena elección PASO, y a Gabriela Mestelán, exdiputada provincial, referente de Encuentro Ciudadano.

Los tres primeros son de la UCR. Nadie duda que Gardonio es un buen político, pero hasta los propios radicales saben que tendrían que alinearse los planetas para que pueda competir con chances en una elección a gobernador. Algo similar podría decirse de Mestelán. En el caso de Leonardo Roquel, hay coincidencias en que aún no está maduro para una competencia de ese tipo; Costa parece subirle el precio adrede, ya que lo ven con chances para disputar la Intendencia de Río Gallegos.

Entonces nuevamente volvemos a Reyes y Costa. En declaraciones radiales realizadas esta semana, la diputada nacional se molestó por la sugerencia de que corría detrás de lo que el senador proponía. Esta “marcada de cancha” de la legisladora se empieza a hacer cada vez más evidente. Incluso, algunos dirigentes de Río Gallegos que antes no dudaban en sostener que “respondían a Eduardo”, hoy dicen “responder a Roxana”.

Pero no todos creen en este “divorcio político”. Incluso, hablan de una estrategia elaborada para que el “Costismosiga dominando el centro de la escena política opositora, apartando a otros sectores que hace tiempo intentan disputarle poder dentro del partido y de la alianza hoy llamada “Cambia Santa Cruz”.

Senador Eduardo Costa.

La dirigencia de la zona norte, encabezada por los radicales de Caleta Olivia, viene acusando a la cúpula de la UCR de verticalista. En Río Gallegos, el radicalismo que representa Pablo Fadul, tampoco se suele mostrar conforme con las decisiones del “Costismo”. Incluso otros dirigentes locales, como el exconcejal Fabián

Leguizamón, no parecen ser invitados al debate.
En pocos meses más se realizarán las internas, donde se medirán fuerzas. Y aunque serán en 2022, está claro que tendrán un peso específico en las decisiones que se tomen en el 2023.

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