Las autoridades de la provincia china de Shandong, en el este del país, anunciaron el hallazgo de un OVNI cerca de la costa y se preparan para derribarlo.
El objeto volador no identificado fue localizado en aguas del mar Amarillo, cerca de la costa de la ciudad de Rizhao, según las autoridades marítimas provinciales en un comunicado recogido por el diario estatal internacional chino Global Times.
El Ejército chino, según la nota, se está preparando para derribar el objeto. Las autoridades piden a los pescadores de la zona que adopten las medidas de protección necesarias.
No se dio más descripción de la aeronave, y no se explicó exactamente cómo planeaban las autoridades derribarla.
Este anuncio tiene lugar en plena crisis con Estados Unidos y Canadá luego del descubrimiento de presuntos globos espía chinos.
Estados Unidos y Canadá denuncian la presencia de “globos espías” chinos en sus cielos
El OVNI que ahora ronda los cielo chinos, fue descubierto horas después de que un avión de combate estadounidense F-22 derribara un objeto no identificado y no tripulado sobre el espacio aéreo canadiense. En declaraciones a Fox News, los funcionarios estadounidenses describieron el objeto como un “pequeño globo metálico con una carga útil atada”, mientras que otros informes de los medios lo describieron como cilíndrico.
A comienzos de esta semana, las fuerzas estadounidenses derribaron otros dos naves no identificados. Una fue derribada cerca de Alaska, mientras que el primero fue alcanzado por un misil frente a la costa de Carolina del Sur. El último avión, descrito como chino “globo de vigilancia” – se había abierto camino a través de todo el país de oeste a este antes de que fuera derribado, supuestamente reuniendo inteligencia sobre “sitios estratégicos” en el camino, según el Pentágono.
Beijing negó las acusaciones de espionaje e insistió en que la nave era un “dirigible civil” que se había desviado del rumbo. Desde entonces, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China ha condenado a los políticos y medios de comunicación estadounidenses por utilizar el incidente para “atacar y difamar a China”, mientras que la administración Biden impuso sanciones a seis empresas a las que acusó de ayudar a Beijing “programas aeroespaciales”.
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