La familia de Jhonatan “Colo” Williams reclamó justicia y aseguró que los jueces demostraron “no estar interesados” en el caso del joven de 20 años que fue asesinado a golpes, piedrazos y palazos en la vía pública de Pico Truncado en 2018.

En una conferencia realizada este sábado, la tía de Jhonatan Ezequiel expresó el enojo que tienen con la Justicia, por la falta de respeto hacia su familia y aseguró que uno de los jueces se durmió varias veces durante el proceso judicial.

En el primer día del juicio – el martes- el abogado de la familia Alberto Luciani y el fiscal de instrucción de Pico Truncado, Matías Parajon hicieron el pedido de cambio de caratula de “homicidio en riña” a “homicidio calificado” para los cuatro acusados, Cristián Gabriel ReyesJorge Óscar LoiIsaac Omar Loi y Nicolás Leonel Herrera. 

“Ese día, uno de los jueves el Dr. Juan Pablo Olivera, se durmió en tres oportunidades, para nosotros es una falta de respeto. Estamos hablando de un homicidio”, comenzó diciendo la mujer

FOTOS: JULIO HARO / GENTILEZA LA GACETA TRUNCADENSE

“Con esa acción, me transmitió que no le interesa lo que ocurre y dio una excusa absurda, dijo que era un método de meditación. Yo me retire sabiendo la decisión de uno de los jueces”, agregó.

En la audiencia de este viernes, el tribunal compuesto por Mario Albarrán, Juan Pablo Olivera y Griselda Bard resolvió rechazar dicho pedido.

Al respecto, la familia resaltó que el cambio de calificación legal se le negó al fiscal Matías Barajon, diciendo que debería haber  presentado el pedido en una instancia previa. “Ellos no pueden desconocer que cuando la causa cursaba en el juzgado de Instrucción Nº1 Barajon no tenia una responsabilidad civil, ni estaba involucrado en el caso”.

“Tengo un malestar muy grande con el juez de la localidad, no estuvo a la altura para resolver este tipo de hechos. Antes del crimen de Ezequiel la estadística era 1 muerte cada 4 años, después de lo que sucedió con mi sobrino la estadística es otra. Libero la zona para el que quiera matar, mate”, denunció.

Además recordó que al poco tiempo del crimen, tuvieron un inconveniente con uno de los imputados. “Fuimos a preguntar porque no se nos había informado de su liberación y nos dijeron que a la se secretaria se le traspapeló”.

Por otra parte, la familia se desligó del escrache social que comenzaron a surgir a través de las redes sociales contra los imputados. “Durante estos 4 años y 71 días que estamos sin Ezequiel, jamás ejercimos violencia contra las personas involucradas”.

“Mi pelea no es con la familia de los imputados, no tenemos odio ni queremos venganza. Entendemos que la venganza no nos va a devolver a mi sobrino y no queremos ocasionarle a la familia más dolor.

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