“Nunca voy a ser feliz, porque me mataron a mi hermano”

En las últimas horas hizo declaraciones públicas la hermana del joven asesinado por policías de la localidad de Las Heras. Recordó a su hermano a siete años del crimen, y también a los efectivos que declararon a favor de los sindicados autores materiales del hecho. Además, relató otros hechos que marcaron a una familia signada por la desgracia.

En el marco del pasado día de la policía de la provincia, Andrea Gorosito realizó declaraciones al Canal 3 de Las Heras. En la oportunidad recordó a su hermano Jonathan, torturado y ultimado el 21 de julio de 2011 en el interior de la Seccional Primera de la misma localidad. Asimismo, haciendo uso de la ironía, saludó a los “policías corruptos, que no son todos, a los que juraron protegernos. A los que estudiaron para cuidarnos”.

La mujer destacó que si bien, hoy está “tranquila” y le es posible hablar acerca del caso de su hermano sin quebrarse, nunca podrá conseguir la felicidad. “No voy a estar feliz jamás, porque me mataron a mi hermano de la peor manera: a golpes. Hoy lo puedo decir tranquilamente. Después de tantos años de pelear, de luchar pidiendo justicia, sin marchas y en silencio. Este luto que llevo, solo yo lo sé”, indicó.

Del mismo modo relató que antes de 2011 su vida era totalmente distinta. Vivía en Entre Ríos, su madre y hermanos estaban vivos. Pero ese año todo cambió. Su hermano Elías “fue secuestrado por policías” y nunca más supieron de él. A mediados de años se produjo el asesinato de su otro hermano, Jonathan, y años más tarde falleció su madre.

En este contexto, Andrea recordó a los efectivos de la fuerza que, con motivo del juicio celebrado en 2015, declararon a favor de los imputados: Ismael Salas, Carlos Humberto Velázquez y Ricardo Ángel Alvarado. “Esos efectivos que estuvieron a la par de los asesinos de mi hermano, cómplices por falso testimonio, declararon que eran inocentes y señores policías. No necesito en mi vida a policías como el señor Angulo o el señor Ramírez”.

Finalmente reafirmó su compromiso por encontrar justicia para su hermano. “No tengo miedo de perder la vida buscando justicia. Nada me lo va a devolver, pero tampoco voy a parar de buscarla”, sentenció.

El juicio
El tribunal conformado por Juan Pablo Olivera, Cristina de Los Ángeles Lembeye y Jorge Omar Alonso, sentenció a los imputados de la muerte de Jonathan Gorosito. El agente Ismael Salas recibió una condena a prisión perpetua e inhabilitación absoluta, al ser declarado “autor penalmente responsable del delito de tortura seguida de muerte”.

El cabo Carlos Humberto Velázquez fue condenado a 16 años de prisión de cumplimiento efectivo e inhabilitación absoluta perpetua, al ser considerado autor penalmente responsable del delito de tortura. El oficial Ricardo Ángel Alvarado recibió una pena de 7 años de prisión de cumplimiento efectivo e inhabilitación absoluta, mientras dure la pena, por ser considerado autor penalmente responsable del delito de “omisión funcional”.

Oportunamente, también se ordenó revocar las excarcelaciones de Salas y Velázquez, quienes quedaron detenidos, pero si mantener la libertad de Alvarado, con condiciones. Dos años más tarde el oficial seguía en libertad. Casación había confirmado la sentencia.

La muerte
La noche del 21 de julio de 2011, Jonathan Gorosito se encontraba en la vía pública cuando fue detenido por presunta “actitud sospechosa”. Tras un fuerte cruce verbal, cerca de la hora 4 de la madrugada, fue alojado en un calabozo de la comisaría. Tras el juicio se comprobó que allí mismo fue brutalmente golpeado hasta la muerte. Uno de los condenados aseguró en el proceso que lo había encontrado ahorcado, fruto de un supuesto suicidio que luego desmintieron las pruebas.