¿Qué te dijo Cristina de tu visita a Santa Cruz?

Juan Grabois: Es una pregunta la respuesta básicamente es la siguiente: es mejor pedir perdón que pedir permiso. No pido permiso, así que vine.

¿Qué evaluación hacer de la visibilidad o no de tu candidatura adentro de Unión por la Patria?

JG: Justamente, nuestra propuesta es darle visibilidad a lo que no tiene visibilidad, y que la Argentina tiene que ser un país plural con todo el mundo adentro, y para eso, los que están en situación de mayor vulneración de derechos, tienen que tener una representación política social institucional, y eso es lo que hemos tratado de hacer durante los últimos años de nuestra vida.

Hablás de una Argentina más humana, y decís que tu proyecto es el que más cerca está del pensamiento de Cristina. ¿Cómo fueron esas horas donde decidiste subirte ante la salida de Wado. ¿Hubo un llamado con ella?

JG: Uh no sé si puedo contar mucho de eso, pero sí que me enteré una hora antes que el resto de los mortales y ya sabía todo el mundo cuál era nuestra posición. Nosotros queríamos que sea Wado porque representa, no solamente a los hijos de la generación diezmada, porque es un tema biológico, sino porque es un hijo de las luchas del 2001 que abrieron nuevo capítulo en la historia Argentina, dentro del cual se enmarca la década ganada. Porque la justicia social y los buenos gobiernos no caen como maná del cielo, hay luchas atrás de eso y después hay hombres que saben cómo suena la música y la desarrollan. No lo supo hacer Duhalde, que eligió la represión mientras que Néstor eligió el camino de abrazar a los organismos de Derechos Humanos, a los movimientos sociales, y Cristina lo profundizó confrontando con los sectores de poder político.

Entonces no había ninguna posibilidad de que nos sintetice Sergio Massa porque representa, primero, la figura del político profesional, no del militante. Y hay una forma de predecir la conducta futura de la conducta pasada. Cambiarse de partido como de camiseta a mí me genera desconfianza. ¿El modelo mental de Massa es un modelo nacional popular latinoamericanista? Ahora quiere ser amigo de Cristina y de La Cámpora etcétera, bueno, eso es parte de lo que pasa en la superestructura, pero él no está planteando un programa de, vamos a decir burdamente, nacionalismo económico, no está planteando ampliar YPF litio y que controle la mayor parte de los yacimientos de litio, su posición frente al Fondo pésima, es la continuidad de la posición de Guzmán.

Este documento que sacó el staff del FMI es más explícito: reducción de la masa salarial, ajuste de tarifario, hacer más chico el gasto social en los sectores más empobrecidos. Si Sergio Massa dice, como pidió Cristina, tengo una 45 en la cabeza, no puedo hacer otra cosa, yo estaría diciendo que no comparto pero es valiente, pero él eligió decir que fue un buen acuerdo y lo celebró. Entonces, necesitamos un triunfo de Unión por la Patria. Si gana Sergio Massa lo vamos a apoyar pero no un cheque en blanco y si ganamos nosotros, vamos a hacer un muy buen gobierno.

GRABOIS ELIGIÓ A LA OPINIÓN AUSTRAL. El precandidato a presidente de Unión por la Patria junto a las periodista Sara Delgado. FOTOS: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

No te gusta que digan que tu candidatura está para contener el voto kirchnerista

JG: Nosotros no queremos contener a nadie, ni en la organización social ni en la lucha política. Condicionar es una forma de transformar, es decir, nosotros al día siguiente de las PASO, si nos toca perder, Massa va a tener que adoptar una parte importante de nuestro planteo si quiere los votos de nuestros compañeros, porque la gente está muy decepcionada y si no logramos que haya una síntesis programática, va a ser difícil un triunfo electoral.

En 2018 dijiste que había persecución política y acompañaste a Cristina a declarar. En tu gobierno ¿cómo se terminan los sótanos de la Democracia?

JG: Mi idea es que la Capital Federal no puede estar más en la ciudad de Buenos Aires, no sólo por Comodoro Py, por un montón de otras razones, porque el modelo de desarrollo centralista destruye un proyecto de país. El centro político en la Capital Federal es consagrar la teoría de la pandilla del Barranco, que es la teoría en el sentido amplio de la palabra, un saqueo y un ayuntamiento del modelo agroexportador que hay que combatir. De paso nos sacamos de encima Comodoro Py. Luego hay que hacer una reforma de la Constitución y está la batalla político cultural, porque antes de que se fuera la mayoría automática menemista por pedido de Néstor, todos los días había movilizaciones en la Corte y ahora, qué sé yo, hay cosas en el marco de la estrategia de defensa de Cristina post atentado que ameritaban una actitud mucho más beligerante, y sin embargo

¿A eso te referías con que no ves resistencia popular?

JG: Y, la verdad es que si cantás que si la tocan la Cristina qué quilombo se va a armar, y no se arma ningún quilombo, algún problema hay, de coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, y en la Corte no hubo ni media manifestación. Cuando se deja el espacio público para utilizar únicamente el espacio virtual como mecanismo de disputa política, es un error. El pueblo ganó las principales batallas en la calle y no creo que hayamos canalizado correctamente ese proceso de lucha y resistencia.

LA FOTO QUE DIO QUE HABLAR. Luego de la entrevista con LOA, el precandidato visitó a Alicia, a la que le reconoce su gestión en Desarrollo Social. FOTO: GOBIERNO

El exministro de Economía, Amado Boudou dijo que la economía popular no es peronista. ¿Pensás que es una forma de correrte a la izquierda?

JG: Yo no lo conozco personalmente. Tenía una imagen de él como de un tipo medio yupi, que venía del UCD, que le gustaba la farándula, y la que me contaba que el tipo había cambiado era Alicia Castro, que es una mina muy coherente y que está recaliente porque salió a hacer de vocero de Massa. Ella conoce bastante porque algo de política latinoamericana internacional sabe, ¿no?, fue embajadora en varios lugares: Londres, Moscú, Venezuela, o sea que conoce los vínculos de los manzanos… es decir, cuando Cristina dice que no fue magia, hay muchas cosas que no son magia y los golpes de palacio tampoco son magia, pero sacando eso, lo de Boudou es el problema que tiene la gente que no viene de la raza peronista y agarra el peronómetro. Me crié rodeado de libros de Perón, los leí todos y mi compañía de fórmula, también, y es además, una de las sociólogas más brillantes de la Argentina, con doctorado en Conicet, etcétera. La verdad que, entre Boudou o Abal Medina, sobre temas doctrinarios del peronismo… y, qué se yo, me parece que no le da para eso. Y el peronismo tenía una particular preferencia por el modelo cooperativo, lo cual fue también silenciado. En el 49 la Constitución establecía la inconstitucionalidad del desempleo, porque decía que quien no tuviera trabajo, el Estado debía garantizárselo. Nosotros encontramos una forma, por ahí él tiene otra actualización teórica y doctrinaria del pensamiento humanista y cristiano de Perón, que es una economía plural, de hecho, pero siempre habla de economía social, que es una economía plural, donde hay lugar para el sector privado, el público y también para la economía regional, comunitaria y eso no implica cristalizar la pobreza. Porque en la realidad lo que hay que hacer es ampliar los derechos de los trabajadores, no negar que existe un determinado sector de los trabajadores…

¿Cuál es el vinculo que hacés entre las propuestas a la juventud y la salud mental?

JG: Primero que hay que reconocer que el que no tiene algún nivel de salud mental, en una sociedad de pospandemia, con cambio climático, con exclusión social, con redes sociales, con estos niveles de competencia, individualismo, es un marciano. Yo mismo tengo problemas de salud mental, entonces la cuestión es que no se reconoce como una problemática político social sino como un problema individual. Si nosotros somos un poco más grandes y vivimos una década de estabilidad, no estamos del todo bien, imagináte la pibada. Entonces eso tiene que ser una política de Estado, tiene que estar en la escuela, en las universidades, en los centros de atención primaria de la salud, y cómo se vincula eso con el acceso a la vivienda, laburo, bueno, son lo que emerge de conceptualizar la tarea de gobierno del punto de vista de lo humano. Cuando estás obsesionado con la balanza comercial, con el déficit fiscal, perdés noción de lo que está pasando en la realidad. No es que eso no sea la realidad, pero es un aspecto, pero tenés que estar obsesionado con lo que le pasa al ser humano y a la naturaleza. Lo demás todo se arregla. Para que alguien pueda construir su casa no necesitás dólares, la construcción no tiene insumos dolarizados y eso le cambia la vida a la gente profundamente. Nosotros planteamos trabajar, descansar y ser feliz. Hay gente que vivió toda su vida en cargos públicos que dice que los compañeros que están en la economía popular son vagos y cuando lo escucho me doy cuenta de que se cree su propia mentira.

LA “ESTAFA” DEL FMI. Tras visitar Santa Cruz, Grabois y Abal Medina recibieron al embajador EE.UU., Marc Stanley, para rechazar el endeudamiento macrista.

¿Cómo fue tu vínculo con Alicia Kirchner como ministra de Desarrollo Social?

JG: A Alicia no la conocí, la vi un par de veces después, pero en la etapa de los gobiernos de Cristina negociaban con nosotros otras personas. Y la verdad es que yo tengo como una especie de deuda con ella porque no valoré las cosas en su momento, las valoro a la perspectiva. En realidad no sé si es una deuda con ella porque el tipo que está en una organización social tiene que putear hasta que no quede un solo pobre en la Argentina. Para mí es muy importante reconocer los errores porque yo desvaloricé cosas que ella hizo, sobre todo legislación y te puedo dar ejemplos concretos como la 26.160 de Pueblos Originarios, que es una ley muy importante o registro de sectores de economía local y social, que está muy bien pensado, el monotributo social está muy bien pensado, el programa que fue antecedente del Potenciar Trabajo, estaba muy bien pensado. Eran cosas que yo no conocía y que estaban muy bien.

Alicia Kirchner fue quien en la Liga de Gobernadores pidió que los planes sociales fuesen administrados por las provincias, ¿estás de acuerdo?

JG: El problema si se comprende la política sociolaboral como una herramienta de construcción partidaria o como una herramienta de producción y trabajo, y cuál es el rol de los movimientos sociales y de las instituciones en el proceso de organización de la economía popular, que tiene un rol concurrente. Las organizaciones sociales son muy buenas haciendo lo que hacen, el problema es fundamentalmente cuando la famosa birome la tienen determinados actores que arbitrariamente pueden decir vos sí, vos no. Y ese actor puede ser un gobernador, un intendente, un puntero de una organización social. Un elemento central de peronismo es que, a igual trabajo, igual salario, y yo te podría decir, parafraseándolo, que a igual necesidad, igual derecho. Entonces, lo que es injusto es que, habiendo cinco personas en la misma situación, una sola persona tenga un cupo para poder desarrollar una tarea en una cooperativa, y eso es algo que hay que resolver a partir la universalización de las políticas. Un ejemplo es la AUH, pero ahí no se queja nadie porque es para todos los que están en la misma situación, bueno, con el acceso a un trabajo mínimo garantizado, o un complemento de ingreso, que nadie tenga que depender de un tercero para conseguir el acceso, eso se resuelve el problema de la discrecionalidad.

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