Las mermeladas caseras tienen sus secretos de elaboración, se trata de un procedimiento antiguo y natural que permite disfrutar de un dulce con calidad nutricional, conservándolo fresco por largos períodos de tiempo.
Las conservas de frutas, verduras y otros ingredientes nacieron como una forma de acumular alimentos en las épocas de abundancia para contar con ellos durante la temporada de escasez. A través de la historia se fue modificando el método a medida que la experiencia revelaba nuevos descubrimientos. Por ejemplo, se aprendió que el frío o el calor del sol podían aumentar el tiempo de conservación de los alimentos.
En la actualidad, la elaboración de conservas caseras se convirtió en una costumbre gastronómica de autoconsumo, una fuente de ingresos y una forma de experimentar con los sabores de las distintas cocinas del mundo. Las opciones son infinitas y las combinaciones a gusto del comensal.
El primer paso para conservar las preparaciones a base de frutas consiste en seleccionar las que estén lo más frescas posible y en piezas de tamaños similares. Luego se deben limpiar, pelar y cortar, siempre de forma pareja. Después se le añade un almíbar casero o se prepara una confitura, cocinándolas junto a una determinada cantidad de azúcar y ácido cítrico. El endulzante funciona como un conservador natural que ayudará a controlar las bacterias y gérmenes por sus propiedades antisépticas.
Consejos de envasado
Es recomendable utilizar envases de vidrio que hayan sido esterilizados para asegurarse de que no posean ninguna bacteria. Para eso, se los debe sumergir en agua hirviendo durante, al menos, 10 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, hay que escurrirlos sin tocar el interior del recipiente. Optar por aquellos de tapa a rosca ya que garantizan un hermetismo absoluto.
Es fundamental etiquetar cada producto indicando qué tipo de conserva es y su fecha de preparación o envasado.
Mermelada de frutos rojos
Ingredientes
- 200 grs. de frutos rojos congelados (cerezas, frutillas, moras, frambuesas)
- 40 grs. de azúcar
- Jugo de 1/2 limón
- 2 cdtas. de agua
Paso a paso
1- Colocar todos los ingredientes en una olla.
2- Calentar a fuego medio e ir removiendo poco a poco para reducir.
3- Para saber que la mermelada a llegado a su punto se debe colocar un poquito en un plato y si ya no se escurre entonces es momento de apagar el fuego.
4- En caso de preferir una preparación sin semillas o trocitos de fruta habrá que colar.
5- Colocar en un recipiente previamente esterilizado y almacenar.
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