En el marco del 135 Aniversario de Río Gallegos, este sábado se inauguró el Monumento al Tango en la capital provincial. Se trata de “El Virulazo”, una escultura elaborada en hierro, con un peso de dos toneladas y una altura de 3.50 metros, realizada por la artista Estela Trebino y su hijo Alejandro Coria.

 

En una sencilla ceremonia que se llevó en la rotonda ubicada en la intersección de las calles Magallanes y Gobernador Lista, el intendente Pablo Grasso, acompañado por el diputado por pueblo Eloy Echazú, la presidenta del Concejo Deliberante, Paola Costa, el director de Gestión Cultural, Maximiliano Pisani y demás integrantes del gabinete municipal, se dejó formalmente inaugurado este monumento al Tango que, como en otros puntos del país, homenajea al bandoneón.

 

 

 

En la ceremonia, Mario Albornoz, uno de los referentes y de los principales impulsores de esta iniciativa, agradeció al jefe comunal la concreción de este monumento. Asimismo destacó que el propósito original y desde hace varios años era poder contar incluso con una plaza del tango, algo que aprovechó la oportunidad para solicitarle.

 

 

Por su parte, Grasso destacó la labor de las entidades tangueras de la ciudad e incluso recordó cuando siendo concejal se le dio impulso a las  jornadas de milonga que se fueron sucediendo con mucho éxito en la
comunidad.

Cabe señalar que en la oportunidad, se presentaron artistas locales, para agasajar de esta manera a todos aquellos amantes de este ritmo, patrimonio de la humanidad desde el año 2009.

 

Cabe recordar que en 2013 se comprometió la construcción del monumento al tango en Río Gallegos. En aquél momento fue anunciado por el ministro de Turismo, Enrique Meyer y el intendente de aquel entonces Raúl Cantín. El objetivo era promover a la Argentina como marca turística internacional, buscando vincular la cultura del Tango mediante promociones que lograran atraer turistas.

 

 

Lamentablemente, la obra llegó rota, por lo que estuvo dando vueltas por distintos depósitos, hasta que durante esta gestión se mandó a reparar. La tarea fue encarada por el escultor local, Juan Carlos Villegas, e instalada en su sitial por agentes municipales de la Secretaría de Obras Públicas. Ahora podrá ser disfrutada por todos los riogalleguenses y los turistas que visiten la capital provincial.

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