Una nueva clausura tuvo lugar en Río Gallegos, cuando once personas mantenían una “cena de trabajo” en el quincho Fentos, ubicado sobre calle Fitz Roy al 292.

La Opinión Austral pudo saber que los asistentes eran todos de entre 30 y 45 años, quienes decidieron compartir la noche después de una jornada laboral ajetreada.

Un vecino, de forma anónima, fue quien realizó la denuncia al advertir el ruido y el movimiento atípico para un lunes y en plena cuarentena.

 

La cosa venia para largo, pero terminó mal. Patrulleros cortando la calle, Tránsito Municipal interviniendo en el lugar y hasta Comercio clausurando el salón de eventos. La situación no fue para nada discreta. Varios autos estacionados en la vereda daban la pista de que algo sucedía en el interior.

Ariel Rivera, jefe de inspecciones de Comercio, contó a LU12 AM680 que había más de 10 personas reunidas en el lugar, pasadas las 12 de la noche. Hubo control de alcoholemia y secuestro de tres coches.

No es la primera vez que les solicitan intervenir en operativos de este tipo. Días atrás, clausuraron el Polideportivo Porto, donde más de 30 personas se habían reunido y donde, también, golpearon a una oficial de la Policía.

 

“En el quincho nos dijeron que estaban haciendo una cena, logramos registrar unas once personas y la realidad es que hoy seguimos luchando con las reuniones sociales y juntadas clandestinas”, lamentó Rivera.

En paralelo, explicó que incautaron la bebida alcóholica del lugar y remarcó, para finalizar, que el foco de contagios no se ha dado en el comercio, sino que “el problema está en las juntadas”.

Leé más notas de La Opinión Austral