Las Grutas está en el centro del escándalo luego de que se realizara una fiesta multitudinaria y sin las medidas de protección sanitaria por el Covid-19 en el parador y bar conocido como la Quinta Bajada, uno de los más concurridos por los jóvenes que vacacionan en la ciudad balnearia.
La lamentable situación ocurrió el primer fin de semana desde que empezó la temporada de verano, con la reapertura de locales gastronómicos con estrictas medidas de seguridad. Pero los locales bailables seguían inhabilitados para funcionar, así como los eventos culturales.
Sin embargo, en la madrugada del domingo en la zona de la playa, el reconocido parador se copó de gente, donde además hubo un show musical, baile, y ninguna medida de seguridad. Sobre la arena, otra multitud de jóvenes aprovechaba la música del pub y armó otra “fiesta”.
Como si no existiera la pandemia, el boliche estuvo lleno de jóvenes que no utilizaban barbijos ni mantenía la distancia social. También compartían vasos y botellas. La organización recomendaba desde el micrófono evitar el amontonamiento, pero todos hicieron oídos sordos. La fiesta siguió sin ningún control hasta el amancer.
El Municipio de San Antonio Oeste tomó cartas en el asunto e inició una investigación para conocer detalles de lo ocurrido. “Justo esa noche en ese local no hubo inspección municipal y no se pudo constatar lo ocurrido. El Juez de Faltas local no convalida sanciones por videos, sino que debe existir la presencia de los inspectores en el lugar del hecho. De igual forma, estamos evaluando la posibilidad de restringir horarios de restaurantes y bares para evitar estas situaciones. Igual, repito, no están habilitados los boliches”, explicó el secretario de Gobierno, Joaquín Landiver, al diario LM Cipolletti.
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