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Este miércoles, impresionantes auroras australes se observaron en Tierra del Fuego y Punta Arenas, ofreciendo un espectáculo de luces rosadas en el cielo nocturno. Astrónomos habían explicado que, si la actividad solar continuaba y el clima acompañaba, podían detectarse desde algunos sectores de Santa Cruz con baja contaminación lumínica.
La predicción se cumplió: vecinos de la provincia difundieron imágenes del fenómeno, visible con mayor claridad durante la noche en Punta Loyola, El Chaltén y también en el Macizo del Deseado. Las fotografías circularon rápidamente en redes sociales, donde usuarios mostraron sus capturas. En ciertos casos, las luces se distinguieron a simple vista; en otros, solo aparecieron mediante cámaras con exposición prolongada.
Qué son y cómo se forman las auroras australes
De acuerdo con especialistas en meteorología espacial, las auroras australes ocurren cuando una tormenta solar —una fuerte emisión de partículas cargadas desde el Sol— interactúa con el campo magnético de la Tierra. Esa colisión crea un espectáculo luminoso en la atmósfera, especialmente en zonas polares.
En diálogo con LU12 AM680, María Fernanda Andrés, guía de astroturismo en la Fundación Amigos de la Astronomía y fundadora de Acrux Astroturismo, explicó que los recientes fenómenos luminosos “son producto de una eyección de masa coronal del Sol que impacta sobre el campo magnético terrestre, generando la llegada de partículas excitadas en la atmósfera y hacia los polos. Esa interacción produce las auroras boreales y australes, que en estos días se pudieron ver incluso en latitudes poco comunes”.
Según la guía astronómica, “el Sol tiene ciclos de actividad de aproximadamente 11 años, y actualmente estamos transitando uno de esos periodos. Por eso vemos mayor cantidad de fenómenos solares y auroras”. Sin embargo, aclaró que “estas tormentas solares siempre existieron, solo que ahora contamos con tecnología que nos permite detectarlas y medir su intensidad”.
El color de las luces depende de los gases atmosféricos que intervienen en la reacción: el oxígeno genera tonalidades verdes y rojas, mientras que el nitrógeno produce azules y violetas. Aunque el fenómeno se manifiesta con mayor frecuencia cerca del Polo Sur, bajo determinadas condiciones puede extenderse hacia latitudes más bajas.
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