Pablo Silva, especial desde París.

Dos que se despiden y dos que siguen. Sebastián Báez (20°) y Mariano Nanone (31°) se despidieron de Roland Garros al perder sus partidos este jueves, en tanto que Francisco Cerúndolo (23°) y Tomás Etcheverry (28°) lograron avanzar a tercera ronda.

Báez cayó ante el austríaco Sebastián Ofner por 3-6, 3-6, 6-4, 4-5 y 7-6, mientras que Nanone perdió por 6-2, 6-1, 3-6, 1-6 y 6-1 frente al checo Thomas Machac.

Quien sigue en gran nivel es Cerúndulo. Tras vencer en sets corridos a Yannick Hanfmann, superó al austríaco Filip Misolic por 6-2, 7-6 y 6-0. En tercera ronda chocará ante el estadounidense Tommy Paul (14°), por un lugar en los octavos de final.

Etcheverry, en tanto, le ganó a Arthur Rinderknech por retiro. El francés lo superaba 6-3 y 7-6, pero en el tercer set el argentino levantó y le ganó 6-1. En el cuarto, cuando “Tomy” estaba 5-0 arriba, el europeo abandonó por lesión. Ahora el próximo rival del platense será el noruego Casper Ruud.

“Constancia”

Tras otra gran victoria, Francisco Cerúndolo habló con La Opinión Austral y otros medios de prensa presentes. Marcó que “sostener la constancia de principio a fin” es clave para “mantener la seguridad y el ánimo de cara a lo que viene”.

Consultado respecto a la próxima serie, manifestó que es un rival que conoce. “La veo muy dura. Es un rival que me toca muy seguido, ya hubo cinco partidos y fueron todas batallas. Ojalá pueda jugar un buen tenis, porque Paul viene muy firme. Creo que será durísimo. Ojalá pueda ganar, creo que será un gran partido para los dos”.

Por último, respecto a su último grand slam, dijo que si bien el año pasado “llegué mejor”, este 2024 lo tiene “con más experiencia, soy otro jugador“.

El ritmo

Etcheverry fue consultado por cómo ve esta edición de Roland Garros, con partidos de noche, y dijo que “es completamente diferente”, ya que afectan las lluvias y la bola “no pica como antes“, pero marcó: “Hay que adaptarse”.

Destacó que en el partido de ayer “me costó bastante entrar en ritmo” y que ahora los juegos “se vuelven mucho más difíciles“.

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