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Un inesperado hallazg ocurrió durante una transmisión en vivo del CONICET: científicos encontraron un antiguo casete VHS en el fondo del Mar Argentino, a miles de metros de profundidad, con una estrella de mar adherida a su superficie. El descubrimiento se produjo en el marco del proyecto “Vida en los extremos”, una expedición científica que explora ecosistemas marinos profundos y que se transmite en streaming.
Luego de los recientes hallazgos de una nueva estrella “culona” y el ataque de una matarraya a una réplica de coral, la vida sumarina sigue sorprendiendo. En esta oportunidad, el equipo biólogos, geólogos y oceanógrafos a bordo del buque Falkor (too) y que controla al robot submarino ROV SuBastian, encontró una cinta de video a 2000 km de profundidad.
Según relataron los investigadores, el VHS se encontraba sorprendentemente intacto pese a las condiciones extremas del entorno. “Está intacto, es increíble. A menos que lo hayan arrojado recientemente, esto demuestra la durabilidad del plástico y cómo puede permanecer durante años sin degradarse”, señaló una de las científicas mientras el vehículo submarino levantaba la cinta del lecho marino.
La escena llamó aún más la atención cuando se observó que una estrella de mar se había adherido al VHS, introduciéndose incluso en uno de los orificios del casete, como si lo utilizara a modo de refugio. El residuo tecnológico, completamente obsoleto, había sido incorporado al hábitat marino, convirtiéndose involuntariamente en soporte de vida.
El hallazgo del VHS en el fondo del mar no solo generó impacto en redes sociales, sino que también reavivó el debate sobre la contaminación por plásticos en océanos profundos y la capacidad de adaptación de las especies marinas en ambientes hostiles. Lo que alguna vez fue basura, hoy forma parte de un ecosistema que se desarrolla en condiciones extremas de presión, oscuridad y bajas temperaturas.
Hasta cuándo se extiende la expedición del CONICET
La aventura científica comenzó antes del amanecer del 14 de diciembre, cuando el buque RV Falkor (too), perteneciente al Schmidt Ocean Institute, zarpó desde el puerto de Buenos Aires rumbo al sur. La travesía se dirige hacia regiones del océano poco exploradas, donde el mapa se vuelve incierto y las condiciones son extremas. La expedición concluirá el 10 de enero de 2026 en Puerto Madryn.
Guiados por la doctora María Emilia Bravo, un equipo integrado por 25 investigadores del CONICET, la Universidad de Buenos Aires (UBA) y especialistas internacionales se propuso explorar tres áreas clave del talud continental argentino, marcando un hito para la investigación marina nacional.
Desde la primera inmersión en el norte del Mar Argentino, cada descenso del ROV SuBastian transformó la oscuridad abisal en un verdadero laboratorio vivo. Las transmisiones permitieron acercar a la sociedad imágenes inéditas de paisajes y especies nunca antes observadas frente a las costas del país, generando una audiencia masiva y momentos que rápidamente se volvieron virales.
El impacto de estas transmisiones científicas ya había quedado demostrado previamente. El proyecto de streaming realizado por científicos del CONICET en el cañón submarino Mar del Plata obtuvo una gran repercusión pública y fue reconocido con el premio Martín Fierro de Oro a los Canales de Streaming 2025, consolidando esta iniciativa como un modelo innovador para la divulgación científica en Argentina.
El proyecto “Vida en los extremos” tiene como objetivo estudiar ecosistemas que se desarrollan sin luz solar, sostenidos por filtraciones de gas metano, utilizando tecnología de última generación. Más allá de los descubrimientos científicos, la campaña continúa generando conciencia sobre la contaminación marina y el impacto de los residuos humanos incluso en los lugares más inaccesibles del planeta.
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