Este miércoles el presidente Alberto Fernández presentó el proyecto de Ley de Organización y competencia de la Justicia Federal con asiento en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las provincias.

El proyecto se propone “consolidar una Justicia independiente, regida por las mayores normas de transparencia y que desarrolle los proceso con celeridad e independencia” y para eso, con el objetivo de mejorar el servicio de Justicia, va a duplicarse la cantidad de los Juzgados Federales.

En este marco, el abogado constitucionalista Eduardo Barcesat dialogó en exclusiva con LU12 AM680 Río Gallegos sobre este proyecto de ley que va modificar el sistema judicial argentino.

“Es un buen proyecto dentro de lo que se puede hacer por ley de la Nación y sin reformar el texto constitucional”, expresó el letrado.

“Lo que se va a lograr es que amplíe el fuero federal incluyendo a los actuales jueces en lo Penal Económico y en lo Penal Tributario que están perfectamente capacitados para entender la temática que refiere a la competencia federal específicamente, eso ampliaría de 12 a 46 jueces el número de los que integrarán el futuro fuero penal federal”, explicó.

Que haya una justicia que cumpla con el principio de legalidad

Además, se refirió a las repercusiones que tuvo la presentación del proyecto en el sector de la oposicióm: “Hay que destacar, porque esto ha sido bombardeado por fake news, que las causas actualmente radicadas en Comodoro Py no van a ser sorteadas nuevamente. La reforma va a regir para lo futuro a fin de preservar esto que se llama juez natural de la constitución”, aclaró.

“Toda la ‘alaraca’ que hacen algunos medios de comunicación de que es para quitarle las causas a los jueces que acostumbran perseguir al opositor político, tirenlo a la basura porque está expresamente previsto que se aplicara a partir de su entrada en vigencia, que significa no solamente la aprobación por Congreso de la Nación sino la implementación que debe hacerse después”, se explayó Barcesat.

 

  1. Entrevista con el abogado constitucionalista Eduardo Barcesat.


Sistema procesal y juicio por jurado

En otra línea, el abogado detalló que “se va a implementar el sistema procesal penal acusatorio, saliendo del sistema inquisitorial que es el que rige actualmente donde el juez de Instrucción tiene la función de juez y la función de acusador para que la acusación e investigación pase a ser de competencia del Ministerio Público Fiscal”. Es decir, “jueces como jueces de garantía del proceso judicial y los fiscales en la tarea de investigar y formular los requerimientos y la incorporación de prueba de cargo“, explicó.

Además, se refirió a la idea de avanzar a juicio por jurado: “Eso va a llevar su tiempo para ser implementado, me parece bueno que el pueblo tenga intervención en la administración de justicia”, comentó.

Fueros

En esta línea, Barcesat señaló que el proyecto pretende unificar “los fueros Contencioso Administrativo Federal, y Civil, Comercial y Federal, perfectamente aconsejable, hay un rimero de planteos de incompetencia de lo Civil y Comercial y de lo Contencioso Administrativo”, dijo y agregó: “Se acaba eso y todos se entienden con la misma competencia. Siempre para las causas que ingresen una vez que se apruebe la ley”, reiteró.

Las causas actualmente radicadas en Comodoro Py no van a ser sorteadas nuevamente

Corte Suprema y Consejo de la Magistratura

“Hay un debate que creo que está o muy bien encarado, pareciera que fuera el número de ministros de la Corte y no la funcionalidad de la Corte Suprema de Justicia”, remarcó Barcesat.

Respecto a este eje, apuntó a que “si se trata de incrementar el número de ministros manteniendo la funcionalidad que todos tienen que intervenir en todo, sepan o no sepan de cada materia, esto no va ayudar”.

En este sentido hizo alusión al mandato de Carlos Ménem en los 90, y las modificaciones en la Corte que se aplicaron en ese entonces: “Ya se hizo el ensayo durante el gobierno menemista de ampliar de cinco a nueve (jueces), y lo único que se logró es más dilación y después formar una mayoría automática, que fue uno de los episodios penosos de la Justicia Argentina“, subrayó.

 

“Lo que sí sirve y propicia es que se incremente el número y se divida por especialidad y que la Sala Constitucional sea la que tengan los aspectos de control de Constitucionalidad y Convencionalidad, es decir de los tratados internacionales. Esto sería un avance grande para poder darle tratamiento serio a las más de 10 mil causas que por año ingresan a la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, continuó el abogado.

 

Para cerrar, Barcesat sostuvo que la reforma judicial busca “que haya una justicia que cumpla con el principio de legalidad, una ley aplicada en todos aquellos casos que conforme su contenido debe ser aplicado“. “Esto es basal, elemental -prosiguió- pero difícil a veces de lograr en la administración de Justicia”. Y para cerrar, destacó que estos cambios procuran “que los jueces cumplan, porque también para ellos está el deber de obediencia a la supremacía a la Constitución Nacional y decir Constitución Nacional es decir su texto y el de los tratados internacionales de Derechos Humanos”.

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