De manera impensada, Esmeralda Mitre abrió la duda sobre la transparencia del voto telefónico dentro del “Cantando 2020“. Esta duda que hoy dejó en evidencia la última en irse del programa ya sobrevolaba cuando estaba al aire el “Bailando por un sueño“.

Pero Esmeralda no duda sobre la cantidad de votos que recibió sino que asegura que ella ya había renunciado antes de quedar eliminada la semana pasada.

“Me fui tranquila, estoy contenta porque puede tomar la decisión que quería tomar. Me fui tranquila y en paz. Yo quería renunciar e irme del Cantando. Renuncié directamente a Tinelli. Directo a él. No a la producción. Me da muchísima pena porque yo sé que el rating me acompañaba. Y lo digo con humildad porque es un hecho fáctico”, dijo en su primera entrevista tras la eliminación en el programa “Informados de todo” que ahora está a cargo de Horacio Cabak por el positivo de COVID-19 de Guillermo Andino.

Y agregó: “Nunca estaba menos de 50 minutos o el programa entero. Si me critican o no a mí me deja de importar. El hecho fáctico es que me llevaba el programa. Siempre me divertía. Soy una persona muy trabajadora y respetuosa. Me puse el programa al hombro. En un momento sentí que era mucha responsabilidad para mí. Necesitaba más cuidado. Llegué a un momento de mi vida y mi trabajo que había decidido tomar la decisión de estar en este programa pero que sentía que le estaba dando más al programa de lo que el programa me daba a mí”.

Mitre hizo hincapié en que ella era pico de audiencia y que todos los repechajes en los que participó no fueron porque canta mal sino porque necesitaban que vaya al programa para darle audiencia.

“Estaba a la vista. No podía estar siempre en repechaje porque el rating lo pedía. Es lo que le dije a Marcelo, tengo que hablar con la verdad, lo quiero mucho, lo que sí es que no está bien es que no se haya dicho que yo renuncié”, afirmó sobre el supuesto acto desleal de la productora de Marcelo Tinelli.

Mitre hizo hincapié en que ella era pico de audiencia.

“Yo no digo nada de todo eso. No tengo ni idea. El programa funciona así, con el voto telefónico. Igual quedamos en que lo iban a decir y no lo hicieron por eso lo digo yo. Me costó mucho y me dio mucha pena. Fue un mar de lágrimas para ellos y no supieron cómo retenerme. Está bueno saber que renuncié yo. El derecho de piso lo pagué hace mucho. Fueron tres días que me pedían por favor para que me quede”, añadió picante.

Y finalizó: “El programa me lo estaba poniendo al hombro. Había una cuestión de que era pico de rating. No sólo era pico sino que lo sostenía. Encima competía contra Jesús, sino hubiera hecho mucho más rating. Y yo pensaba por qué le estoy dando todo esto al programa y el programa solo me da cachetazos por parte del jurado para que yo vaya y esté todos los días”.

Leé más notas de La Opinión Austral