Por Hugo Ferrer

No importa el lugar. Lo que importa es el mensaje. Primero fue en la festividad de la Santísima Trinidad, luego en la Cámara de Diputados y hace unos días con motivo de homenajear a los periodistas, monseñor Oscar Ojea,  presidente de la Comisión Episcopal Argentina, sigue firme con su prédica contra el juego online que impacta en los adolescentes.

Crónica, como lo ha publicado en el diario, en las web y también en el canal, pone énfasis en esta temática que preocupa a miles de familias, educadores y diversos actores sociales que tratan de concientizar sobre esta preocupante realidad.

La alerta por las apuestas online se profundiza en las escuelas. Crece en los establecimientos secundarios con dos agravantes: la falta de contención familiar y la compleja realidad socioeconómica. Para algunos, es una batalla perdida”, reconoció un preceptor de un colegio porteño en diálogo con el periodista Matías Resano de Crónica. “En los recreos es descomunal la manera en que apuestan. Uno no le puede decir nada y no estamos autorizados a pedirles el teléfono. Entonces el chico hace lo que quiere. Yo lo noto porque les ‘relojeo’ los celulares, pero si pasa alguien de la dirección y los ves jugando, tampoco puede hacer algún tipo de advertencia. En hora de clase la utilización del celular está supeditada a la consigna del docente. Supuestamente no pueden estar jugando, pero tratan de evitar el control del profesor”.

La concejal María Laura Rodríguez estuvo en Crónica: “Hay que recuperar la palabra juego para los chicos”.

A muchos profesores los excede la problemática: “No sabemos si el chico está leyendo un texto que se le pidió en la clase, chateando con alguien externo, mirando las redes sociales o apostando online”.

¿Por qué juegan en la escuela? ¿Porque no hay información respecto a los riesgos ni un control? ¿Se perdió el límite en los colegios? La única respuesta es caso unánime: “Hay una devaluación general de la institución escolar, sea pública o privada”.

Y el flagelo, en muchos casos inevitable, ¿cómo “el casino está en casa”? ¿Qué herramientas tienen las familias para evitar la tentación de obtener “dinero fácil”? Y cómo controlar el destino final del dinero que los padres le transfieren a sus hijos. La lucha constante.

Para la psicóloga Débora Blanca, “más del 23% de los apostadores invierten cifras superiores a los $10 mil pesos.  Es necesaria la  sanción a sitios ilegales.  El 80% de los chicos apuesta en sitios ilegales.”

Por eso, la palabra de la iglesia, en la voz del presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, parece un grito en el desierto, pero sigue siendo un llamado de atención, enciende las alarmas, y lo pone en relieve. El último mensaje lo dio en la sede de la calle Suipacha, con un tono suave y micrófono en mano,  delante de varios periodistas, dónde Crónica estuvo presente: El juego online nos preocupa y sobre el que estamos muy contentos de que haya proyectos en la Cámara de Diputados.  Desde que se ha legalizado ha crecido tremendamente a través de compañías que se enriquecen muchísimo a través de esto que significa ‘tener un casino en casa’.  Es impresionante ver en los partidos de fútbol cuando ya no se ve el partido de fútbol, sino que se ven jóvenes apostando continuamente, mirando continuamente el teléfono, más preocupados por apostar que por el partido mismo. Esto crea una seria adicción. Ha aumentado la ludopatía entre chicos de 14, 15 y 16 años. Tenemos que estar atentos a este fenómeno que entra dentro de todo el fenómeno evasivo de nuestra realidad que hace que nuestros chicos vayan eligiendo caminos ilusorios, pero también es propio de la pobreza, la multiplicación del juego. Cuando la pobreza empieza a ser grande se recurre a esto para poder ganar dinero de cualquier manera y se rompen muchísimas ilusiones, pero lo que preocupa sobre todo es en los adolescentes”.

Monseñor Ojea hizo mención a lo que pasa en las canchas de fútbol. Pero han surgido, además, otras historias que le han revelado a Crónica: los adolescentes que “en los cumpleaños de 15 no salen ni a bailar. Se quedan toda la noche de la fiesta en sus mesas… apostando, con la mirada fija en el celular.”

Monseñor Ojea junto al Papa Francisco.

A todo esto, se presentaron siete proyectos en Diputados para regular el juego online y la prevención de la ludopatía digital. Durante la reunión de la Comisión hace un mes, presidida por la diputada nacional Mónica Frade (Coalición Cívica),  mostraron también el video del Monseñor Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina.

Para la diputada nacional Constanza Alonso (UxP), autora de uno de los proyectos, “los juegos online son una preocupación en las instituciones educativas y deportivas de nuestro país. La única estadística oficial afirma que 7 de cada 100 personas tiene problemas de ludopatía; pero no hay aún en nuestro país estadísticas oficiales sobre la ciber ludopatía infantojuvenil. “

Desde la UCR, la diputada Marcela Antola, pidió en su proyecto que en las publicidades, en horario permitido, deben prohibirse que aparezcan personalidades destacadas, deportistas, periodistas o personas de ficción, salvo que sea para dar un mensaje responsable por el tema de la ludopatía. “No se puede publicitar en medio de un evento deportivo, sea por TV, radio o transmisión en línea”.  

En la Cámara de Diputados sesionó la comisión, encabezada por Mónica Frade. Todos preocupados por la apuesta de los menores al juego online.

Por su parte, Marcela Campagnoli (Coalición Cívica) enfatizó la necesidad de “concientizar, fortalecer a las familias y darles herramientas a los docentes para prever situacionesEstá en juego nuestra niñez y nuestro futuro. El 95% de nuestros jóvenes tienen acceso a internet y de allí el agravamiento exponencial de la conducta problemática”. Para la diputada Silvana Giudice (PRO), “internet sirve para estudiar, trabajar y conectarse, pero también sirve para ser una puerta de acceso a las adicciones, como es el juego.”

Un informe del año pasado de Kantar Ibope Media alcanzó a más de 10.000 personas. Casi el 10% reconoció que hizo  apuestas online. Y surgieron datos más preocupantes: de esos apostadores,  el 10%  juega todos los días, el 19,2% lo hace cuatro veces al mes, y el 25,7% lo hace dos, tres, cuatro, cinco y hasta seis veces por semana.  Además, el 12,5% de los jóvenes de entre 15 y 24 años han apostado alguna vez, mientras que entre los 24 y 34 años ese porcentaje alcanza el 15,5%. Y no sólo se destacó la millonaria inversión publicitaria de las casas de apuesta online, sino que además son el sponsor del 28% de los equipos de primera división. Entre 2021 y 2023,  invirtieron $11.158.162.386 en publicidad.

Según Débora Blanca, psicóloga especialista en Ludopatía y directora de Lazos en Juego, reveló en El Auditor Info que el punto de quiebre fue la legalización del juego online en el 2020. Eso cambió la población que empezó a apostar. El juego problemático con las apuestas online está creciendo especialmente en la franja de 12 a 16 años. En relación a la cantidad de dinero apostado, más del 23% de las y los apostadores invierten cifras superiores a los $10 mil pesos. Por otro lado, el juego online está más extendido entre quienes viven en el Área Metropolitana de Buenos Aires en comparación con otras regiones del país. Uno de los factores que inciden para el incremento de la ludopatía es la accesibilidad: cuanto más accesible, más posibilidades de consumo. Las billeteras virtuales también juegan un papel fundamental porque justamente desde el celular apuestan y desde el celular también transfieren el dinero para apostar, o sea está todo ahí a la mano, literalmente en la mano”. También es necesaria la prohibición del sponsoreo de la industria del juego, la sanción a sitios ilegales, el 80% de los chicos apuesta en sitios ilegales. Son necesarias campañas de concientización, de prevención y de visibilización, talleres en las escuelas, charlas abiertas a la comunidad, a los padres. Todo eso hay que hacer”.

Especialistas reconocen que además preocupa la  salud mental en pos pandemia y de ahí surge el pedido de ayuda adolescente. 

Otros temas que ponen el semáforo en rojo por las apuestas online de los menores:  la bancarización mucho más temprana a través de las billeteras virtuales y  cómo surgieron  plataformas que tienen filtros etarios fácilmente franqueables.

El debate instalado también tiene en la mira los procesos de verificación de la edad del apostador/ usuario. Así, buscan  la implementación de una campaña preventiva dirigida a niños y adolescentes.

En Crónica TV, la concejal de Bolívar, Maria Laura Rodríguez (UxP) expuso la problemática ante el periodista Agustín Alvarez Rey. En pocas palabras, la síntesis de lo que todos sueñan: “Hay que separar el juego del consumo, hay que separar el juego de las apuestas. Hay que recuperar la palabra juego para los chicos”.

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