La presión que ejercen los certámenes de cocina como Bake Off se hicieron notar en la primera gala de eliminación del domingo, cuando Hernán, uno de los participantes, sufrió un ataque de nervios en pleno programa e incluso quiso retirarse por miedo a descompensarse.
La consigna del día planteada por Damián Betular, Dolli Irigoyen y Pamella Villa fue realizar, en dos horas y media, una torta de 20 centímetros de alto con decoración estilo candy. Pero Hernán tuvo una mala pasada cuando se desmoronó su bizcochuelo.
“Me estoy sintiendo muy mal. Me quiero ir, te juro”, le dijo el participante a una compañera. “Angustia, mal humor, nervios… todo estoy pasando”, siguió. La conductora Paula Chaves intentaba calmarlo, pero era inútil.
Minutos después, su frustración continuó al ver que se le había roto el plato donde pensaba presentar su torta. “Estoy muy angustiado, muy nervioso”, reiteró y quebró en llanto. “Me siento descompuesto. Me falta el aire. Me quiero ir de acá. Deseo irme en este momento”, agregó uno de los mejores pasteleros del certamen hasta el momento.
Más adelante, a la hora de juzgarlo, Pamela Villar expresó: “Si no te hubiera visto y veía esta torta, nunca hubiera dicho todo lo que pasó. Mirá lo que hiciste… tratá de tomar fuerzas de lo que vas logrando y no de lo que no te sale como esperabas”.
En las redes sociales no dejaron pasar este momento y aseguraban que Hernán estuvo actuando el momento, e incluso bromeaban con la difícil situación que pasó: “Hernán es como el compañero que decía que no estudiaba y después se sacaba un 10”, comentaron usuarios de Twitter. Algunos incluso compararon la escena con una similar que tuvo de protagonista a Samanta Casais en la temporada anterior de Bake Off Argentina.
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