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Asuntos Internos de la Policía de Santa Cruz intervino en la investigación por el femicidio de Antonella Aybar en la localidad de Caleta Olivia. La joven de 25 años de edad fue asesinada por su novio de 23 años llamado Nicolás Moyano.
En un primero momento, la Policía defendió el accionar los los uniformados en la casa donde ocurrió el femicidio. Sin embargo, luego de la nota publicada por La Opinión Austral, en donde se expuso la declaración de la madre de Nicolás Moyano, el Ministerio de Seguridad de Santa Cruz ordenó una investigación interna a través del organismo de la Jefatura de Policía.
La madre de Moyano, Stella Maris Ganga, dijo que autorizó a la Policía a entrar a la casa y así consta de la declaración que brindó en el Hospital. Además el Juzgado nunca recibió un pedido para ingresar o allanar “ni por llamada, ni por escrito”, según supo La Opinión Austral.
Cómo fue el femicidio y el aviso de la madre
El hombre la golpeó, le arrebató la vida y luego se suicidó. Antes del fatal desenlace, Moyano acuchilló a la madre, de 53 años, cuando ella llegó de trabajar intentó intervenir y detener las agresiones a las que era sometida su nuera. La señora había declarado que escuchó ruidos de la habitación de su hijo y pensó que “estaban jugando y se estaban riendo“.
Sin embargo, cuando se acercó al dormitorio contiguo, para escuchar tras la pared, se dio cuenta de que Antonella gritaba “No, Nico“, entró al lugar en el que se encontraba los jóvenes y descubrió que su hijo le estaba propinando una golpiza a la joven. “Él me dijo que estaban jugando y Anto me comentó que le estaba pegando“, fueron los dichos de Ganga frente a los uniformados de la Comisaría de la Mujer y la Familia, que le tomó una declaración a mano alzada cuando la atendían en el Hospital Zonal “Padre Pedro Tardivo”. Fue en ese momento que Moyano insultó a su mamá y después la apuñaló.
“Me atacó, forcejeamos hasta que le saqué el cuchillo, luego sentí burbujas debajo de la axila, a lo que me percaté de que me había apuñalado, salí de la casa y mi hijo me decía que entre de nuevo para hablar, pero me fui corriendo hacia donde estaba mi vecino, quien me ayudó y llamó a la policía”, fueron los dichos de la mujer que se encuentra fuera de peligro y deberá declarar nuevamente ante el Juzgado de Instrucción Penal N° 2. En la declaración, la señora mencionó que previamente no había notado ninguna anormalidad que indicara que su hijo ejercía violencia contra Antonella y manifestó que la pelea era por celos.
La parte más fuerte de la declaración de la madre del homicida es cuando la policía le pregunta si sabe si su nuera sufrió lesiones y ella responde “no sabría decir, por ese motivo quiero que ingresen a mi casa“. Después, Ganga fue consultada nuevamente si estaba de acuerdo en “la intervención de las dependencias policiales para el ingreso a su vivienda y así poder constatar el estado de las personas que se encuentran dentro”, la mujer respondió que los autorizaba a ingresar, dando cuenta de que es propietaria de la casa. En el único momento que mencionó la moto, fue cuando manifestó que su hijo tiene una Honda 110 de color blanca.
El pedido de Mario Aybar
El martes pasado, Mario Aybar, padre de Antonella, se acercó hasta el edificio en el que se encuentra el Juzgado de Instrucción Penal N° 2, en Hipólito Yrigoyen, y habló con el juez que lleva la causa, el doctor Gabriel Contreras. El hombre, que previamente había declarado en San Jorge que ahora odia a Moyano, había expresado que previo al fatal desenlace había respeto entre ambos y, para él, su hija y el novio eran una “pareja ideal“, exigió justicia. Aybar denunció que contradicciones en el accionar policial exigió respuestas a la Justicia. Dijo: “No creo en la versión oficial, esto no se termina acá”.
“Voy a ir con todo contra la Policía de Santa Cruz“, dijo el hombre, lamentando que si la policía ingresaba antes a la casa donde estaba su hija y yerno, quizá se podría haber evitado la muerte de a joven. Asimismo, Mario Aybar destacó que lo que quiere es “saber la verdad de lo que le pasó a mi hija“. El domingo pasado, familiares y amistades de Antonella le dieron el último adiós, un momento colmado de angustia e indignación del que participó su madre, quien viajó desde Buenos Aires para acompañar en el dolor a su ex marido y sus hijos.
La medida del Ministerio
Desde el Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Cruz le informaron a La Opinión Austral que, por instrucciones expresas del ministro Pródromos a la Jefatura de Policía se dispuso la intervención inmediata de la Sección Asuntos Internos. El fin de la medida es que se investigue “con carácter urgente” el accionar de los uniformados de la Comisaría Cuarta durante el procedimiento que se realizó el pasado 16 de mayo en la vivienda de la calle Escocia del barrio 13 de Diciembre en la que Ganga y Moyano convivían junto a Antonella. La decisión se funda en atención a la “gravedad institucional” que podría derivarse del hecho.
La fuerza de seguridad había sostenido dichos que indicaban que la madre de Moyano dijo que “su hijo y Antonella se habían ido a bordo de la moto (mencionada anteriormente)”, pero eso fue desmentido con la declaración que la mujer de apellido Ganga brindó ante la Comisaría de la Mujer. El caso fue denunciado minutos antes de las 7 de la mañana y la Policía ingresó a la vivienda cerca de la 10, cuando era tarde. La escena era horrorosa, manchas de sangre por todos lados y los cuerpos de ambos jóvenes estaban sin vida hasta ese entonces. El domingo pasado, la familia de la joven le dio el último adiós a sus restos.
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