El 16 de noviembre de 2017 no fue un día más en Río Gallegos. Cerca de las siete de la mañana, la comunidad comenzó a compartir la noticia de La Opinión Austral que daba cuenta de la muerte de un conocido comerciante de la localidad.

Se trataba de Vicente Maillo, dueño de los locales “Doña Ana” y “Casa Maillo”. En el primer piso del primer comercio tenía su casa y fue en su habitación donde lo encontraron sin vida con tres puñaladas entre su pecho y cuello.

 

Las primeras teorías apuntaban a una presunta entradera. Incluso la primera versión de Susana Reina, la ahora viuda del comerciante había asegurado que, cerca de la una de la madrugada, ella estaba entrando a la casa cuando fue abordada por un hombre encapuchado que la amenazó y la hizo subir hasta el primer piso.

 

Vicente y Susana en otros tiempos más felices.

 

Tras maniatarla, fue hasta la habitación donde dormía Vicente y lo asesinó, para luego darse a la fuga. Lo que nunca cerró es que el presunto ladrón no se llevó nada, ni de la vivienda ni del comercio. Este fue el primero de los interrogantes de los investigadores.

 

Luego de dos días, en la Comisaría Segunda, la exsuegra de Vicente, María del Carmen Espiritoso, dijo ser la autora intelectual del crimen. Según indicó, el plan fue pergeñado por ella junto a Susana y sus dos nietos: Luis y José Maximiliano Maillo, además de un presunto sicario que fue el autor material.

 

 

 

En la misma madrugada detuvieron a los primeros cuatro (Espiritoso, por su avanzada edad, tuvo domiciliaria). Tras dos semanas de averiguaciones, una comisión de la Dirección de Investigaciones (DDI) llegó a Buenos Aires para dar con el hombre acusado de sicario: Christian Etchebarne.

 

El tiempo pasó, la causa fue elevada a juicio y debió quedar en stand by. El debate se iba a realizar en febrero de 2020, pero la pandemia y la feria judicial extraordinaria lo patearon hasta hoy.

 

La Policía trabajando en la casa de Maillo. FOTO: JOSÉ SILVA/LA OPINIÓN AUSTRAL

 

Para las ocho de la mañana de hoy se espera que todas las partes lleguen al gimnasio de la Escuela de Policía para realizar el debate, muy esperado por gran parte de la comunidad.

 

La Opinión Austral tuvo acceso al organigrama del debate, que será presidido por los jueces Joaquín Cabral y Jorge Yance, y que se ajustará a las medidas sanitarias vigentes contra la propagación del Covid-19.

 

 

Durante la semana pasada, los trabajadores del Poder Judicial Luis Chaparro, Emmanuel Arias y Sebastián Ojeda acomodaron las mesas y sillas que ocuparán las partes involucradas. Gracias a las dimensiones del gimnasio, no será preciso el uso de cristales divisores para las personas. Además, cada juez tendrá su mesa individual.

 

Según el organigrama, la actividad en el recinto comenzará a las 9 de la mañana hasta las 12:30 del mediodía, con un cuarto intermedio de media hora. Ya luego cerca de las tres y media de la tarde, el debate se extenderá hasta las siete y media, también con un cuarto intermedio de media hora.

 

Respecto al desarrollo de la audiencia, se espera que hoy y mañana se haga la apertura del debate, atender cuestiones preliminares y lo tan esperado: las indagatorias a los acusados.

 

Entre el lunes y el martes se espera que los acusados den su versión de los hechos

 

Tal como lo adelantó el abogado de la familia detenida, Carlos Telleldín, presentará el arma homicida y tratará que el caso sea tratado como un “crimen pasional”.

 

La sala cuenta con un proyector que, según pudo saber este diario, será fundamental para la valoración de pruebas: se mostrarán videos e imágenes del caso.

 

Para el miércoles se espera el testimonio de amigos, familiares y empleados de Casa Maillo y Doña Ana, el día siguiente harán lo propio los encargados de las investigación.

Los alegatos y pedidos de pena para los acusados se dará el próximo 17 de marzo

 

Se presume que uno de ellos será Luis Águila, extitular de la DDI que logró desentramar el caso, y luego los resultados de la autopsia.
Para el miércoles 17 se esperan conocer los alegatos y pedidos de pena.

Leé más notas de La Opinión Austral