Cinco historias y sueños cumplidos en la nueva entrega del Procrear

“El sueño de la casa propia podemos decir que: ¡está cumplido!”, dijo Romina Arriagada a La Opinión Austral.

Ella, su marido Daniel Barría, y sus hijos Santiago (5), Gabriel (6) y Martina (12) son una de las cinco familias que fueron adjudicatarias de las viviendas del plan Procrear.

El jueves la gobernadora acompañó al intendente en la videoconferencia para la entrega de 5 de las 21 viviendas del nuevo barrio Procrear.

Ayer se entregaron otras cinco que llegaron para cumplir los sueños de las familias que anhelaban tener su hogar propio.

“Hoy es un día importantísimo, el día más hermoso de nuestras vidas. Estamos felices de poder tener nuestro hogar y la verdad es que estamos emocionados”, dijo Romina, que contó cómo alcanzaron ese sueño.

“Estamos emocionados”: Romina abraza a sus hijos y Daniel saca la “selfie” en su casa nueva.

“Estamos entre la felicidad y la tristeza, por otro lado, por no poder compartirlo con familia y amigos, pero ya vendrán tiempos mejores” auguró.

Explicó que se sorprendieron porque no esperaban contar con su casa en pandemia. “La realidad es que estamos asombradísimos. Vimos que se abrió la inscripción en mayo del año pasado y tomamos la iniciativa y nos anotamos por Internet”, contó.

Las cinco nuevas viviendas se suman a las cinco del día jueves, con la primera entrega.

En febrero de este año, se toparon con la mejor noticia: “Nos avisaron que habíamos salido adjudicados en un departamento de tres dormitorios, ya que al ser cinco y la nena ya es grande, queríamos un dormitorio para ella, así que es la más feliz”.

Dijo que todo salió “bastante rápido”, pero que la ansiedad era muy fuerte. “Desde que nos enteramos estábamos ansiosos, y a partir del mes pasado cuando nos contaron que iban a hacer la entrega, más todavía”.

Carla Cepeda vive con su hija Lola, de 9 años. Se inscribió al plan porque sus hermanos le insistieron para hacerlo. “Yo estaba recién separada. No calificaba para préstamos para créditos para hacer mi casa. Soy agrónoma y trabajo en INTA, y somos las dos con mi hija”, explicó.

Para Carla, “la felicidad se hizo palpable” cuando se enteró que fue adjudicada.

Es así que se anotó y calificó: “Jamás imaginé que algo tan soñado como una casa iba a ser un premio tan grande para que me toque a mí. Llegó en 2020”. En marzo se declara la pandemia y todo fue “cuesta arriba”.

“Parecía que jamás iba a llegar. Me avisan que iban a entregar todo y la felicidad se hizo palpable nuevamente. Y esta mañana murió mi viejo después de pelearla años”, explicó Carla.

“Imagínate lo que es esto para mí hoy”, contó en una mezcla de sensaciones que le costó describir. “Pasó en la madrugada y ahora vine a buscar mi llave. Se fue sin ver esto, pero está acá”, relató.

En febrero se enteraron que fueron adjudicados, pero la pandemia postergó los trámites.

Por su parte, Heraldo Abraham, su mujer Sandra y su hijo Gastón también cumplieron el gran sueño.

Con su mujer se conocen desde los 17 y 19 años, respectivamente. Hoy Heraldo tiene 32 y mencionó que para ellos fue muy difícil.

“Son muchas sensaciones encontradas, porque todavía no podemos caer en la cuenta de que hoy tengamos nuestra casa propia”, contó, y describió que están “felices”.

Vanesa vivirá en su nuevo hogar con sus hijas Antonella de 21 años y Ornella de 15

Finalmente, Vanesa Ojeda, mamá de Antonella de 21 y Ornella de 15 años, contó emocionada que todavía le cuesta caer. “La verdad no pensé que la entregarían este año, por todo lo que está pasando con la pandemia. Por suerte se pudo concretar la entrega, así que estoy más que feliz”, describió.