Personal policial del Comando Radioeléctrico de El Calafate intervino el domingo por la mañana en un accidente de tránsito registrado en la costanera de la villa turística.
El siniestro vial ocurrió cerca de las 06:30 horas. El llamado de alerta lo dio un vecino, precisando que el mismo ocurrió en la avenida Costanera, en proximidades del Hotel Las Dunas.
Cuando la primera comitiva acudió al lugar se topó con un Renault Clío color blanco. Estaba incrustado de frente contra una palmera de alumbrado público. En su interior, no había ocupantes.
Tras recorrer las inmediaciones, la Policía logró dar con el conductor. Un joven de 25 años, quien presentaba lesiones visibles producto del fortísimo impacto que le dio a la palma, así como también aliento etílico.
El accidentado fue trasladado al Hospital Samic en donde fue atendido por médicos y se le certificaron heridas de carácter leve. En tanto, su vehículo fue secuestrado y quedó a disposición del Juzgado de Faltas local, el virtud de no poseer la documentación pertinente y circular bajo la ingesta de bebidas alcohólicas.
El Fiesta en el que viajaba una familia riogalleguense a El Chaltén. FOTO: GENTILEZA DE SEBASTIÁN DEL MARCO
Camino a El Chaltén
En tanto, horas más tarde, cerca de las 14:00, una familia de Río Gallegos protagonizó un violento vuelco en la ruta provincial 41. Iban camino a El Chaltén, de vacaciones.
Producto del accidente, una mujer de 46 años (conductora) y sus hijos de 18 y 12 años, resultaron con lesiones de diversa gravedad.
El Ford Fiesta color bordó en el que viajaban quedó destruido, dado vuelta a la vera de la calzada. La pareja de la conductora, un hombre de 50 años y quien circulaba en otro vehículo, fue el primero en auxiliar a los accidentados.
Personal de la Comisaría de El Chaltén tomó conocimiento del hecho informados por el puesto sanitario local, luego de que el matrimonio se presentara allí para ser atendidos.
Pese a la magnitud del incidente y que el vehículo diera varios tumbos luego de que su conductora perdiera el control sobre este, ninguno de los ocupantes está grave. Su vida no corre riesgo. Solo el menor de edad debió ser sometido a estudios de mayor complejidad para saber qué grado de lesión tuvo.
Todos ellos iban con el cinturón de seguridad colocado, medida de seguridad que evitó que salieran despedidos del habitáculo.
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