La noticia de la reapertura de peluquerías es tomada con cautela por propietarios y trabajadores del sector, que ya vivieron un intento frustrado en las primeras semanas de septiembre.
Sin embargo, según pudo saber La Opinión Austral, el lunes se aprobaron los protocolos entre algunos referentes y el Ministerio de la Producción de la provincia que establecen, entre otras cosas, que sólo podrán acceder dos clientes a la vez como máximo.
Algunos comprenden la situación epidemiológica; otros aseguran “que no dan más” y piden abrir
Con este panorama, volverían a abrir en Río Gallegos, pedido que ya cuenta con reclamos y caravanas por la ciudad luego de la crisis que impactó de lleno en varios comercios.
A este pedido también se sumaron esteticistas, masajistas y gimnasios que estaban en la misma situación que las peluquerías.
Carolina Neil, presidenta de la Cámara de Comercio de Río Gallegos, fue prudente y señaló a Radio LU12 AM680 que están esperando “por buenas noticias”, augurando que “ojalá que haya una confirmación oficial”.
Sobre los rubros de estéticas y gimnasios, Neil recordó que la “flexibilización” previa al brote de casos positivos comenzó por etapas.
En primer lugar, señaló, abrieron las peluquerías y a los 15 días los centros de estética, quedando en último lugar los gimnasios.
Las estéticas están cerradas desde el 1 de agosto, sin contar el cierre de los primeros meses
Marianela tiene el centro de estética ROMA y la situación apremia: “Nosotras seguimos en espera, tenía la esperanza de que nos habilitaran para el Día de la Madre para poder vender vouchers, ya que es una época muy fuerte para nosotras”, contó.
En este sentido, la titular de la Cámara de Comercio sostuvo que “lo necesario es que todos los rubros puedan abrir, aunque sea paulatinamente”.
Otros de los que quedaron afuera son los gimnasios. Gisella Casares es propietaria de Factor X, en Estrada al 487, y mencionó que, sin fecha de aperturas, “es una situación difícil”.
Pese a esto, la dueña del local remarcó que para ella “lo primero es proteger a los alumnos y a nosotros”.
El gimnasio de Gisella está vacío, pero entiende la situación. “Debemos cuidar la salud”, dijo.
“Nosotros entendemos por ahora la situación de no poder abrir. Por ahora solventamos los gastos de alquiler con las cuotas de clases virtuales y alquiler de material, pero vemos difícil una apertura”, describió a La Opinión Austral.
Recordó que cuando lograron la reapertura, era con nueve alumnos por turno. “Imaginate ahora que está todo desbordado, nos dejarían abrir con dos alumnos, eso tampoco sirve”, señaló.
En este sentido, resaltó que cuando pudieron reabrir durante el distanciamiento, hicieron todo el protocolo y no hubo contagios en los gimnasios.
“Pero ahora es diferente, hoy ya estamos muy expuestos y abrir es exponer al alumno y a los profes. Nosotras preferimos esperar un poco más y cuidar a nuestra gente. Es difícil, pero es la realidad hoy y nosotros debemos dar el ejemplo”, afirmó sin dudar.
Desde la Cámara de Comercio, Neil recordó que está vigente la campaña “Mamá Feliz”, mediante la que buscan fomentar las ventas con antelación y por la cual habrá importantes sorteos.
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