Desde 2008, las fiestas no son las mismas para una familia de Río Turbio que perdió a un ser querido por negligencia de varias personas.

 

Se trata del caso de Damián Maichil, un chico de 14 años que vivía en la Cuenca Carbonífera y en diciembre de 2008 se había ido de viaje de egresados a la ciudad de Villa Carlos Paz, en Córdoba.

 

Lo que tendría que haber sido un sueño, terminó trasformándose en un calvario para Damián. Presentó diferentes dolencias cuando estaba en Córdoba, pero la atención que le dieron fue casi nula. Llegó a tener 40 grados de fiebre y a vomitar en el colectivo cuando retornaban después del viaje.

 

La organización del viaje quiso parar en un hospital de La Pampa, pero nadie pudo atender a Damián porque todo el personal médico estaba abocado a un accidente de tránsito. El colectivo siguió su camino hasta la ciudad de Caleta Olivia.

 

La última foto de Damián con su mamá Carmen.

Allí, en el Hospital Zonal de la ciudad de El Gorosito, el joven fue atendido por un doctor que sólo le dio dipirona para bajar la fiebre. El joven presentaba un cuadro de neumonía aguda, pero nadie lo sabía. En la madrugada del 23 de diciembre de hace doce años, llegó el colectivo a la Cuenca Carbonífera.

 

Damián ya estaba convaleciente. Su papá lo recibió y él se cayó en sus brazos. “Ya no daba más, lo llevamos de urgencia al hospital, pero falleció”, dijo en su momento el hombre a La Opinión Austral. Lo de la enfermedad recién se supo días después de la muerte, cuando el cuerpo del joven fue sometido a una autopsia en nuestra ciudad capital y comenzaron las averiguaciones por “homicidio culposo”.

 

Finalmente, quienes llegaron a juicio fueron dos coordinadores de la empresa, el médico que atendió a Damián en Caleta Olivia y los cuatro padres que habían viajado como acompañantes en el viaje y que debían velar por la seguridad y la integridad de los egresados.

 

El debate se realizó el cinco de diciembre del año pasado y, tal como lo informó este diario, el médico fue sobreseído pese a un voto de uno de los integrantes del Tribunal Oral que había indicado que el profesional de la salud tenía cierto grado de responsabilidad. Sólo un coordinador fue condenado a tres años de prisión en suspenso y el otro no estuvo presente por tener problemas de salud.

 

Quienes tampoco estuvieron presentes fueron los padres acusados. A ellos se los declaró en rebeldía, pero en enero se presentaron en Cámara y pidieron la prescripción de la causa, debido al tiempo que había pasado. Además, los abogados defensores destacaron que parte del expediente se había perdido por el incendio de 2015 que afectó al antiguo edificio de la calle Malaspina.

 

Ese planteo fue apelado por la querella, a cargo de los abogados Ariel Peralta y Ricardo Litvachkes.
Fuentes judiciales consultadas por La Opinión Austral indicaron que el expediente sigue abierto y, hasta el momento, el Tribunal no ha resuelto por la situación de los padres acusados, a más de un año del debate oral en el que debían ser juzgados. Asimismo, en declaraciones a este medio, Peralta indicó que “estamos en etapa de apelación, sino seguiremos a otra instancia”.

 

Por su lado, Carmen, la mamá de Damián, indicó que, para ella, ahora diciembre es un mes más. “No tenemos nada que festejar. Siempre llegan estás fechas y siempre falta Damián. Siempre sobra un lugar en la mesa, es muy difícil. Vamos a seguir reclamando justicia, porque eso es lo que queremos”.

 

Respecto a los padres que habían pedido el cierre de la causa, la mamá de Damián aseguró: “Se rieron de la Justicia en la cara, de la desgracia que nos pasó; yo confío mucho en los abogados que tenemos y esperemos que algún día se haga justicia”.

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