Sin duda alguna los sectores más afectados desde el inicio del invierno en la ciudad de Río Gallegos fueron los barrios populosos de la capital. El San Benito, Bicentenario, Ayres Argentinos, Favaloro, entre muchos otros que aún hoy, pese a que las precipitaciones y la temperatura han mejorado, continúan padeciendo las consecuencias climáticas.

FOTO: JOSÉ SILVA.

Cientos de familias fueron afectadas por el deshielo. Sus casas se inundaron y hubo pérdidas materiales más que considerables para todos los vecinos que, con esfuerzo, han construido sus viviendas en estas zonas, tan alejadas del ejido urbano de la capital.

El Municipio riogalleguense pasó máquinas y ayudó durante un par de días, pero el reclamo de los vecinos continúa vigente, puesto que las complicaciones aún persisten en muchos de estos sectores.

FOTO: JOSÉ SILVA.

El Ejército y el Gobierno Provincial estuvieron y están presentes brindando contención y asistencia a las familias cuyas propiedades se inundaron, pero ahora los trabajos con las calles que quedaron destruidas se espera que los realice la Secretaría de Obras Públicas del Municipio, que tiene la maquinaria necesaria para afrontar determinada labor.

Por el momento se han realizado trabajos de perfilamiento en algunos sectores, en las calles “más transitadas y principales”, se comunicó oficialmente. El resto de los vecinos, que no reside por estas avenidas (como la 13, en el San Benito) tiene que ingeniársela para llegar a su casa. Algunos, caminando, van y vuelven completamente embarrados. Otros, en automóvil, se arriesgan a quedar “empantanados”, en algunas de las calles que siguen siendo intransitables.

A las lagunas se les suman también, en algunas zonas, las aguas servidas, lo que claramente representa un problema de salubridad más que importante y que, contrastado con “el poder o no pasar por una calle”, preocupa mucho a los vecinos y vecinas.

“Así fue”

A comienzos de agosto, los barrios lucharon contra las inundaciones. El Municipio solo no pudo y hubo que requerir ayuda a otros entes, que actuaron desde el primer momento.

 

Entre estos, el Comando de la XIra Brigada Mecanizada del Ejército, que desde el primer momento brindó apoyo a las familias afectadas, que fueron muchas.

Tal como lo indicara La Opinión Austral en su edición del pasado 2 de agosto, fueron 20 militares a bordo de seis camiones Unimog quienes trabajaron durante toda la jornada para asistir a los vecinos.

El teniente coronel Rodríguez, que estuvo en los procedimientos, se emocionó y dijo ese día que en el Ejército: “Estamos en todo, lo hacemos porque lo sentimos, más allá del Covid, trabajamos con todo lo que necesite la gente, lo hacemos porque lo sentimos”.
Referentes barriales también hablaron con este diario aquel triste día, marcando que “nunca había pasado algo así, hace unos años había bajado algo de agua, pero no de esta manera”, dijo Gerardo Acevedo, del 22 de Septiembre.

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Por otro lado, el presidente de la Junta Vecinal del barrio San Benito, Juan Romero, agradeció el apoyo de diversos organismos (como Vialidad Provincial, e incluso algunos sindicatos) que se sumaron a trabajar con el personal municipal, ya que caso contrario las consecuencias de las inundaciones habrían sido mucho peor.

Hoy, los vecinos siguen padeciendo la intransitabilidad en calles, aguas servidas, y tienen el temor de que sus casas vuelvan a verse afectadas.

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